Desafortunada prueba de Baylón
Baylón no agradó a la parroquia vallecana en el partido-prueba-presentación de ayer frente al Olympiakos. El internacional peruano estuvo tan pesado como el terreno de juego, poco idóneo para la práctica del fútbol. Demostró, sí, un buen toque de balón para confirmar un tipo de juego sudamericano en el que se maneja el esférico con soltura inigualable. Pero después de los cuarenta y cinco minutos que estuvo en el campo para los aficionados se ha borrado un tanto el agradable recuerdo que en el Mundial de México dejaran impreso aquella delantera peruana compuesta por Baylón, Cubillas, Sotil y Perico León. Su actuación con el Rayo ha sido, si no negativa, sí gris. Y así lo ha entendido el propio entrenador del equipo que, en los vestuarios apuntó la esperanza que él tenía puesta en que González y Pachamé -que llega esta tarde- ocupen los dos puestos de extranjeros que la actual reglamentación federativa concede.El encuentro apenas si deparó algunas jugadas de mérito. El barro y la sucesión de charcos que se formaron en el nuevo campo impidieron el dominio, técnico del balón y pusieron plomo en las botas de los jugadores. Destacable de la primera parte sólo es la jugada que dio lugar al gol conseguido por Francisco a los cinco minutos de juego tras un soberbio avance de Fermín.
La segunda mitad, sin embargo, tuvo mayores tintes de profundidad por ambos bandos y de peligrosidad por parte de la delantera rayista. Si bien el Olympiakos demostró una preparación física notable
Alineaciones:
Rayo Vallecano: Alcázar (Pascual, m. 45); Anero, Uceda, Trasante, Luna; Macua, Francisco, Fermín; Guzmán, Baylón (Iglesias, m. 45) y Potele.
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