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Las Rozas: cesiones de patrimonio municipal

Parte del vecindario de Las Rozas se parece al Gobierno en un punto: agosto ha sido un mes casi normal de ritmo de trabajo. El hecho se debe, sobre todo, a la asistencia masiva a las dos sesiones plenarias que celebró el Ayuntamiento en el mes de julio y en las que vieron como se debatían posibles cesiones de la Dehesa, patrimonio del pueblo.

El terreno municipal de la Dehesa, de unas 100 hectáreas, se ha convertido últimamente en una presa codiciada para distintos organismos en busca de terrenos y solares regalados. Tras la residencia de ancianos de la Diputación, ya edificada, han llegado al Ayuntamiento las más diversas peticiones para conseguir las mismas ventajas. En primer lugar, la Federación Castellana de Fútbol, que quiere crear una escuela de fútbol, asi como una lujosa residencia que pudiera servir de alojamiento a las selecciones internacionales, tanto españolas como extranjeras. El Movimiento, por su parte, pretende montar un centro de Formación Política. La Federación de Patinaje ha presentado también una petición para que se le concedan terrenos para la instalación de una pista. Y finalmente, la Dirección de la Guardia Civil desea la cesión de terrenos para edificar un amplio acuartelamiento destinado a la Primera Comandancia móvil. Como respuesta a estas peticiones, el Ayuntamiento ha tomado el acuerdo en su pleno de 12 de julio, de posponer la decisión hasta tanto no se hagan las mediciones exactas de la Dehesa, labor que ya se ha encargado por el procedimiento de urgencia. El alcalde en funciones ha declarado a EL PAIS, que la tendencia de la Corporación es más bien contraria a la entrega de más terreno municipal. Los vecinos, en cambio, no las tienen todas consigo, sobre todo cuando, por ejemplo, leen declaraciones como las recientes del presidente de la Federación Castellana de Fútbol, Adolfo Gil de la Serna: «Tenemos concedido por parte del Ayuntamiento de Las Rozas el terreno para edificar la Escuela de Fútbol». El alcalde no es parco en desmentidos y los habitantes de Las Rozas, se quedarían más tranquilos si hubiese una declaración formal contra esta afirmación del señor Gil de la Serna.

Carencias graves

Ante estos silencios se ha presentado en el Ayuntamiento un escrito firmado por 450 vecinos en el que se afirma, entre otras cosas, que no deben realizarse esas espléndidas donaciones mientras en el pueblo faltan muchos servicios y equipamientos básicos. En esta carencia coincide también el alcalde en funciones, Francisco de la Cueva, que enumera algunas como metas prioritarias del Ayuntamiento: grupos escolares, Instituto de Enseñanza Media, clínicas municipales, ampliación de la Casa Consistorial, hogares de ancianos y de la juventud, telégrafo, estafeta de correos, etcétera. En Las Rozas faltan equipamientos colectivos, pero lo que no parece faltar es estímulo a la edificación, centrada en algunas grandes urbanizaciones que hacen surgir en poco tiempo verdaderas miniciudades. Este crecimiento «no debido a nuestros méritos sino a la fecunda labor de quien fue nuestro Caudillo», según dice textualmente el acta de la Sesión Plenaria del 12 de julio, está llevando a un posible desarrollo anárquico tan lo más cuanto que Las Rozas no cuenta todavía con un Plan General de Ordenación aprobado. El próximo pleno de septiembre -que se celebra en sesión ordinaria todos los segundos lunes del mes-, es por tanto esperado con verdadera expectación, por si vuelve a plantear en él el tema de l as cesiones de la Dehesa.

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