Cámara constituyente y Ley Electoral negociada, condiciones del PSOE para ir a unas elecciones

El PSOE sólo acudiría a unas elecciones si estas son de carácter general para la designación de una Cámara constituyente por sufragio universal y secreto, y con una ley electoral negociada, ha declarado a Cifra el primer secretario de este partido, Felipe González.Las alternativas actuales del poder serían «moderadamente progresistas o moderadamente reaccionarias» si se va a unas elecciones generales que clarifiquen la situación política. Añadió que se eliminaría cualquier alternativa extremista si la confrontación electoral se produce con rapidez y limpieza.

La negociación de la ley electoral -dijo- tendría por objeto evitar las viejas tácticas caciquiles que podrían desvirtuar el voto.

Felipe González afirmó que su partido está dispuesto a aceptar el papel de principal protagonista de la izquierda como algo inexorable ya en estos momentos. En este sentido, el PSOE sería -según su secretario general- «el eje de cristalización de alianzas y la garantía de estabilidad en una alternativa democrática, el mismo papel que ocupó en 1931 ».

Negó la calificación de socialdemócrata que algunos sectores de la izquierda atribuyen al PSOE, y añadió que, no obstante, en él caben desde actitudes socialdemócratas honestas hasta marxistas no leninistas. Señaló también que en este momento el problema se agrava «porque hay actitudes marxista-leninistas que están ocupando el terreno específico del socialismo democrático» y que se ha de aclarar definitivamente que el partido quiere la transformación de la sociedad capitalista en sociedad socialista.

Sobre la fragmentación del socialismo, Felipe González dijo que el fenómeno se da en todas las corrientes políticas, pero que en el socialismo es más fácil la unidad por cuanto no hay fronteras ideológicas ni adscripciones a determinados bloques internacionales, sino solo problemas de carácter personal.Añadió que en la división de las fuerzas socialistas hay intereses de ideologías contrapuestas. «No sólo los grupos de la derecha, sino en el propio seno de la izquierda se trata de frenar a veces lo que puede ser un crecimiento espectacular y una alternativa a ofrecer por el Partido Socialista».