Dos nuevos terremotos sacudieron ayer China y Filipinas

Dos fuertes temblores de tierra, cuyos epicentros estarían situados en el extremo oriental del continente asiático, fueron registrados ayer por los más importantes observatorios del mundo, diecinueve días después del terremoto que asoló una vasta extensión próxima a Pekín y que causó entre medio millón y un millón de víctimas.

La primera de las sacudidas tuvo su epicentro -según los observatorios- en un lugar situado a unos 150 kilómetros al norte de la ciudad china de Chengtun, en una región distante unos 1.300 kilómetros de aquella donde se produjo el devastador terremoto de finales del mes pasado.Los observatorios sismológicos que registraron el fenómeno -Tokio, Upsala (Suecia), Prato (ltalia), Golden (Colorado, Estados Unidos) y Viena- no coinciden en cuanto al momento exacto en que tuvo lugar este temblor de tierra, que varía entre las 16.05 y las 16.19, hora española.

Todas las informaciones disponibles sobre los dos fenómenos sísmicos registrados en la tarde de ayer señalan que la segunda de las sacudidas fue más fuerte que la primera, y que tuvo su epicentro en algún lugar próximo al sur del archipiélago de las Filipinas.

Mientras que al primero de los temblores se le atribuye una intensidad variable entre los 7,1 y 7,3 en la escala de Richter, el observatorio sismológico de Golden cifraba en ocho puntos de la misma escala la intensidad de la segunda de las sacudidas registradas ayer, que se produjo aproximadamente dos horas después que la primera.

El terremoto que tuvo lugar el 28 del pasado mes de julio en la región de Pekín alcanzó una intensidad de 8,2 en la escala de Richter, y constituyó el fenómeno sísmico más intenso de los últimos doce años.

Según el mismo observatorio de Golden, los dos temblores fueron lo suficientemente fuertes como para causar importantes daños en las populosas regiones donde se han producido. Los responsables del observatorio italiano de Prato calificaron, por su parte, corno «impresionantes» las dos sacudidas sísmicas.En España, el observatorio geoíisico de Toledo acusaba igualmente los dos temblores, que en nuestro país fueron registrados, respectivamente, a las 16.19 y a la 18.26 horas. El Instituto Geofísico de Toledo, que anunciaba que el primero tuvo lugar «probablemente en China oriental», señalaba que el segundo había sido mucho más fuerte que el anterior, y que había alcanzado 7,5 puntos en la escala de Richter.

Los expertos chinos en sismología, cuya reputación es reconocida por los colegas de todos los demás países, habían predicho a finales del mes pasado que un nuevo terremoto se produciría en los días siguientes al del pasado 28 de julio. En base a estas predicciones, sobre cuya exactitud no se tenían dudas, las autoridades de la República Popular China mantuvieron en la calle, en hogares improvisados, a la mayor parte de los seis millones de habitantes de Pekín y aconsejaron a los diplomáticos extranjeros y a sus familias que abandonasen la ciudad.

Sin embargo, sólo hace unos días, los sismólogos chinos anunciaron que el peligro de una segunda sacudida de la magnitud de la anterior ya había pasado, y se autorizó a los pekineses a regresar a sus casas. Situados los epicentros de los dos temblores de ayer a, una distancia relativamente próxima, no es aventurado afirmar que el pánico debió hacer presa ayer de nuevo entre la atemorizada población pekinesa.