Karen Lorraine,
australiana de 19 años, acaba de pasar a engrosar la amplia nómina de Misses de belleza del presente año. Coronas, armiños más o menos sintéticos y una sonrisa que no oculta totalmente el cansancio de la espera. La nueva Miss Joven Belleza Internacional pese a la aparente languidez de su gesto es entrenadora de delfines en Queensland. Entre militantes políticas y domadoras de animales más o menos fieros, el elenco de las Misses comienza a poseer connotaciones exóticas.
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