Sorpresa en los medios catalanes del PSUC

La noticia de la suspensión del acto, llegó a Barcelona cuando los preparativos estaban en su cenit. Curiosamente, el PSUC acababa de transmitir a EL PAIS, a primeras horas de la tarde de ayer, una nota de prensa con la primera información oficial del mencionado partido sobre el tema. Consistía en simples detalles de organización del acto.La primera reacción ante la prohibición dictada por el Gobierno francés que pudo registrar EL PAIS, fue la de Juan Pagés, miembro fundador del PSUC y ex deportado, durante 51 meses, al campo de exterminio nazi de Mauthausen. Pagés, detenido por los nazis en 1939 cuando luchaba junto al Ejército francés, manifestó: «La prohibición del acto por parte del Gobierno francés me ha causado verdadera sorpresa. Recuerdo que, en 1939, cuando los republicanos españoles fuimos internados precisamente en Argelés, pudimos constatar la diferencia de actitudes respecto a nosotros por parte, por un lado, del Gobierno francés y, por otro, del pueblo galo».

El veterano militante añadió que la suspensión «es una medida indigna para los franceses». Y terminó diciendo que «una vez más vemos la gran diferencia existente entre, por un lado, los deseos de libertad y democracia del pueblo francés y de los pueblos de España y, por otro lado, el rechazo de estos deseos por parte de nuestros respectivos gobiernos.

Ayer mismo, y antes de ser conocida la prohibición, un grupo de 160 intelectuales y profesionales catalanes dio a conocer, a través del servicio de prensa del PSUC, un documento en el que «saludan cordialmente» al citado partido en su 40 aniversario de su constitución, la cual califican de «un hecho histórico decisivo en la vida catalana contemporánea».

Los intelectuales y profesionales, añaden que «rendimos homenaje a los comunistas catalanes que han pagado con la vida, la cárcel o el exilio su fidelidad a la clase obrera y a Cataluña, afirmamos rotundamente que no habrá verdadera democracia, ni en tierra catalana ni en el Estado español, sin la plena participación política, en la construcción de un futuro democrático del partido de los que, como comunistas y como catalanes, han luchado sin tregua contra el fascismo por las libertades políticas y nacionales de Cataluña».

Entre los 160 firmantes figuran Antoni Tapiès, Josep María Castellet, Josep Benet, Raimon, Joan Brossa, Oriol Bohígas, Josep-Lluis Sert, Joan Miró, Salvador Espriu, Joan Oliver (Pere Quart), Manuel de Pedrolo, Lluis M. Xirinacs, Maurici Serrahíma, Francesc Pi de la Serra, Lluis Llac, Manuel Jiménez de Parga, Joan Marsé, Terenci Moix, Nuria Espert, Ricard Bofill, Jaime Gil de Biedma, Carles Barral, Luis y José Agustín Goytisolo, Rosa Regás, Elisa Lamas, Josep María Carandell, Carlos Rojas y Maite Arbó.