Un camino a seguir
Unos políticos se van y otros ocupan su lugar, siempre será así, pero las tareas y los problemas duran muchas veces -por su propia naturaleza -más que la vida política de quien tiene la oblipacIón y el buen deseo de resolverlas. Nuestro más reciente ministro de Gobernación atacó con energía Y decisión indudables el grave problema de la seguridad vial, nos consta que bajo su mandato se dieron órdenes específicas y urgentes para acelerar gestiones encaminadas a resolver una situacion que por Io precario de sus viejas estructuras, es causa muy determinante de la pérdida de vidas.Suponemos las iniportantes tareas que esperan a nuestro nuevo ministro, pero nos permitimos desde aquí recordarle respetuosamente y con la más firme esperanza, el compromiso y la necesidad, cada día más latentes, de potenciar al máximo las medidas para que proyectos tan necesarios al bien común, no sean demorados.
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