Silva Muñoz y Ruiz-Giménez coincidieron, en Alicante

«Confieso mi estupefacción por la ruptura pactada», manifestó Federico Silva Muñoz en la primera asamblea interprovincial de Unión Democrática Española (UDE), celebrada el domingo en Alicante. Por su parte el señor Ruiz-Giménez que también se encontraba en Alicante, para presidir una reunión provincial de Izquierda Democrática (ID) afirmó que estaba dispuesto a un debate público en televisión española con, el señor Silva, sobre sus posiciones democristianas.

A lo largo de su intervención el señor Silva, hizo referencia al tema de la regionalización, recordando que UDE pide ésta, pero no el federalismo. «Las autonomías son autonomías y nada más». En este sentido solicitó la regionalización para todos.Consideró urgente una ley electoral que permitiría cuadricular la concurrencia política que pedimos, clarificaría los grupúsculos y desecharía tantas siglas que nadie sabe a quién pertenecen y cómo son».

Sobre las homologaciones de su partido democristiano con otros nacionales e internacionales, reafirmó que UDE «no quiere homologaciones de nadie: sólo quiere la del pueblo español. No estamos en la línea de un partido español indiscriminado, pues queremos insertarnos en la Democracia Cristiana mundial. Esta corriente no es un privilegio de nadie».

Hizo alusión a su reciente viaje a Aquisgrán, en el que se había puesto de manifiesto que las dos tendencias democristianas alemanas apoyababan a UDE. «Es calumnioso decir que la tendencia de Strauss es de ultraderecha. Ambas tendencias se mostraron unidas en el congreso».

Sobre la necesidad (le unión en España con los grupos afines manifestó: «Hay determinados sectores que nos quieren provocar a los líderes. No queremos picar. Permanecemos en silencio con visión clara del futuro de España»

Esta primera asamblea congregó a más de trescientos miembros de UDE de las tres provincias del reino de Valencia y Murcia. A lo largo de la misma se dio la cifra de cuarenta mil personas que en un futuro muy próximo UDE aglutinaría, reafirmándose el objetivo de ser un gran partido de masas. Entre los presentes se encontraban personas ligadas a los intereses económicos del trasvase Tajo-Segura, obra pública que impulsó Silva cuando fue ministro y éste es el motivo por el que las tres provincias valencianas prefieran adoptar una línea de colaboración con Murcia, en vez del camino estrictamente regional.

Poco después Joaquín Ruiz-Giménez, líder de Izquierda Demócratica, hacía unas declaraciones a EL PAÍS, con motivo de su estancia en Alicante para asistir a la reunión del grupo provincial. «No nos oponemos a hablar con los que están hacia la derecha. Lo que, exigimos es clarificación de la actitud democrática. A Silva Muñoz no le pregunto por haber sido ministro de Franco, o estar en las Cortes o tener un grupo parlamentario, sino que le pregunto por qué no pide la amnistía, por qué no solicita desde una ideología cristiana, que no existan discriminaciones de los derechos humanos, por qué no pide la soberanía popular, en lugar del -dominio- de las oligarquías, por qué no reconoce las nacionalidades. Quien no contesta si a esta pregunta no está en la línea democristiana».

En relación al reciente viaje a Aquisgrán del señor Silva, consideró poco adecuada la actuación que este, lider había impulsado a adoptar a la DC alemana, en torno a problemas de orden interno de la DC española. «Acepto un debate público en televisión española con Silva Muñoz si esto es posible».

Sobre los problemas planteados a ID alicantina por la escisión de treinta y dos militantes de Alcoy y Elche, declaró que había venido a solidarizarse con los que quedaban, más de los que se han ido, considerando que alguna autoridad del Gobierno tenía- especial interés en desmoronar la unidad de ID, porque «molesta que haya un sector DC que diga no a las medidas discriminatorias del Gobierno, básicamente la falta de igualdad de los marxistas con los de otras ideologías».