En Cambrils, primer festival español

Por primera vez en la Vuelta 76, un corredor español, Linares, ganó, una etapa. Fue, la décima, Nules-Cambrils, segunda en máxima longitud de las diecinueve totales. La jornada resultó un triunfo absoluto del equipo de Eusebio Vélez, que desencadenó un fortísimo ataque al pie del primer puerto. Se tomó así la revancha del día de Murcia. Balagué, un hombre de Saura, fue el primer autor del desaguisado. En contra de su director atacó y a continuación lo hizo el equipo de Vitoria. Cinco hombres del Super Ser, con el maillot verde Elorriaga entre ellos, llegaron con quince minutos de retraso.La salida no se dio en Nules, sino en Castellón. A los 26 kilómetros, una vez pasado Oropesa empezó la lucha. Hasta ese momento la carrera era un paseo. Balagué, saltándose a la torera las órdenes de Saura, que no deja atacar a sus hombres más que en contadas ocasiones, léase etapa Cartagena-Murcia, saltó un poco antes del cruce de Cabanes. Le siguieron Santisteban, Van den Hoek, Cuyll, Perurena, Torres, Pesarrodona, Mendes, Loos, Jacques el líder López Carril, Karstens y Martins La jugada, pues, era mala para SuperSer desde el principio. Cinco hombres rivales, por sólo dos propios. Dos kilómetros después se descolgaban Elorriaga, Karstens y Martins. El grupo escapado estaba ya en la subida del alto de Cabanes y el maillot verde empezaba a acusar sus molestias de rodilla. El portugués, por su parte, no anda demasiado bien todavía. Quizá se reserve para el Tour.En el kilómetro 29, la ventaja llegaba a su máximo: 30 segundos. A partir de ahí empezaría a descender. En el 30, se quedó Cuyll y uno después el propio BalaguéLa carrera estaba en su momento clave. Antes:del alto, kilómetro 37, el pelotón se fragmentó y en la cabeza quedó un grupo con los hombres fuertes. El piso era francamente malo y los baches se acusaban. Por la cima del alto, de segunda categoría, no muy fuerte, pero suficiente para acabar con las fuerzas, ya mermadas, de algunos, pasó primero Agostinho, delante de Abilleira, Torres, Oliva, Loos y Nazábal. La carrera se habla partido en dos grandes grupos y en el descenso, kilómetro 39, la diferencia entre ambos pasaba de medio minuto. Iría en aumento y 20 más adelante, sería de dos minutos. Claramente se vio entonces que los dos pelotones no se unían ya El equipo de Eusebio Vélez metió en el grupo principal a sus nueve hombres supervivientes. Quería ganar la etapa como única aspiración, porque salvo Elorriaga, Lazcano, Cima y Van Springel, todos los mejores estaban delante. Cinco, Raleigh: Kuiper, Thurau, Kneteman, Pronk y hasta Van den Hoek. Cinco SuperSer: Tamames, Ocaña, Fuchs, Torres y Manzaneque. Cuatro Tekas: Agostinho, Abilleira, Aja y Ventura Díaz. Del Novostil, García. También el líder, Jacques, y otro hombre de su equipo Loos, así como dos Mikos, Vellet, que se quedaría descolgado y Baert y tres Frisols, Priem, que acecha y el maillot verde de Elorriaga, Alland y Van Neste.En la subida del alto de Albocacer, última dificultad de la etapa, se daría la batalla final entre los hombres rezagados. Cima, el gran e scalador asturiano, subió como un meteoro y con él, Lazcano, Van Sprigngei,,que siempre tiene suerte de coger el último tren, Andia no, Mendes y WeIlens. Por la meta del alto pasó primero Oliva, seguido de su eterna pareja, Abilleira. Era el kilómetro 76 y por el 84, en pleno descenso, el grupo de seis corredores citados tornó contacto con el de cabeza. La. diferencia entonces respecto al último pelotón superaba ya los tres minutos y de la forma en que tiraba del prirner grupo o todo el equipo Kas, en especial Santisteban y Pesadorrona, la ventaja se convirtió quizá en la más importante de cuantas se produzcan en está vuelta.En la meta de Cambrils, tras 100 kilómetros finales por la carretera nacional 340, dirección Tarragona, el margen entre los dos grandes grupos sería de más de 15 minutos. A diferencia del día de Murcia, en el que trabajó el Super Ser, pero no ganó la etapa, ayer el Kas sí amarró el triunfo, aunqw a dos kilómetros de la meta saltó un Raleiglí. Salieron tras él Perurena, Martínez Heredia y Linares. El primero hizo el corte al pelotón y avisó a Linares para que escapara. El santanderino demarró fortísirrioy en la línea de llegada sacó once segundos al grupo.