Aleix Gómez da el segundo triunfo a la selección de balonmano de penalti y en el último segundo
España, sostenida por las paradas de Corrales, impulsada por los goles de Adrià Figueras y una preciosa acción final, supera a Noruega por 28-27
Un penalti transformado por Aleix Gómez en el último segundo del partido tras una preciosa jugada final de estrategia dio la segunda victoria en los Juegos de Tokio a la selección masculina de balonmano. Noruega perdió por 28-27 y acabó sumida en la desesperación. Una vez que marcó su último tanto, también desde la línea de siete metros, dio por bueno el mal menor del empate.
La selección española demostró su consistencia y garra tanto cuando va por delante como cuando va por detrás en el marcador. Afiló el colmillo y la ejecución adecuada en ese último suspiro. Sincronizó a la perfección la que debía ser la última acción del encuentro tras el tiempo muerto que pidió Jordi Ribera. Quedaban 18 segundos para el final del partido y el seleccionador español pidió jugar para Alex Dujshebaev. El lateral cántabro se metió en la cueva del lobo, fue emparedado y acabó ejecutando un pase por donde apenas pasaba una aguja. Adrià Figueras recibió y fue volteado por un defensa. El penalti lo ejecutó a la perfección el zurdo Aleix Gómez. Segundo partido y segunda victoria de España, que pisa firme en el grupo y se enfrentará este miércoles a Brasil. En el balonmano compiten 12 equipos divididos en dos grupos. Los cuatro primeros se clasifican para los cuartos de final.
Los síntomas y los detalles positivos que emanan del juego del equipo español refuerzan sus dos primeros y trabajados triunfos. Los dos han sido muy ajustados. Frente a Noruega superó momentos difíciles. Rodrigo Corrales afianzó al equipo desde la portería con una serie de paradas extraordinarias cuando Noruega intentaba abrir hueco. El portero gallego detuvo un tiro casi a quemarropa con 15-17 y a partir de ahí se creció con varias paradas consecutivas incluido un penalti.
La eficacia de Adrià Figueras desde los seis metros, con 10 goles, mantuvo el nivel necesario al ataque español que acusó la falta de eficacia de los lanzamientos de Entrerríos y Alex Dujshebaev. Pero Ribera no dudó ni un instante en jugarse el último ataque con la baza de Dujshebaev. Ni el uno ni el otro fallaron en esa última acción preciosa y perfectamente sincronizada que determinó el triunfo de España.
España, 28; Noruega, 27
España: Corrales; Aleix Gómez (4, 2 p), Gurbindo (-), Alex Dujshebaev (1), Entrerríos (1), Ángel Fernández (4), Figueras –equipo inicial-; Pérez de Vargas (p. s.), Maqueda (2), Sarmiento (-), Solé (2), Morros (-), Antonio García (5) y Guardiola (-).
Noruega: Bergerud; Bjoernsen (4), Reinkind (2), Gullerud (2),O’Sullivan (2), Sagosen (6, 1p), Joendal (9, 3 p) –equipo inicial-; Saeveras (p. s.), Myrhol (-), Fredriksen (-), Oeverby (-), Pettersen (-), Gulliksen (-) y Roed (2).
Parciales cada 10 minutos: 3-6, 8-9 y 13-14 (descanso). 19-18, 24-22 y 28-27.
Árbitros: Nikolov y Nachevski (Macedonia). Excluyeron por dos minutos a Gurbindo, Entrerríos, Antonio García, Dujshebaev, Sarmiento, Sagosen y Gullerud.
Estadio Nacional de Yoyogi, Tokio.
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