Hansi Flick, tras perder ante Las Palmas: “Estamos muy decepcionados”

“Todos saben qué deben hacer, estamos muy decepcionados”, se arrancó Hansi Flick. Ni el regreso de Lamine Yamal rescata al Barça de la ciclotimia. Desde que recuperó su jerarquía en Europa tras golear al Bayern (4-1), en una semana grande que coronó con la victoria en el Santiago Bernabéu (0-4), el Barça ha quedado atrapado en una inestabilidad futbolística, también emocional. Salió airoso del derbi ante el Espanyol (3-1), pero Flick quedó disconforme con la actitud del equipo. Levantó frente al Estrella Roja (2-5) y, sin embargo, se volvió a extraviar frente a la Real (1-0) y el Celta (2-2). De nuevo, cuando parecía que despertaba tras otra goleada en la Champions contra el Brest (3-0), los azulgrana recibieron otro golpe, esta vez el primero en Montjuïc, probablemente el más duro del curso: ante Las Palmas (1-2).

“Creo en estos jugadores. Somos un buen equipo, pero las cosas son como son. Cuando empezó la temporada ya les había avisado de que no habría excusas: cuando jugamos como un equipo unido, le podemos ganar a cualquiera; pero cuando no lo hacemos…”, comenzó su análisis Hansi Flick. El técnico alemán se mostraba tranquilo, igual de impasible que cuando su Barcelona era la sensación de España y de Europa. “Los jugadores creen en la manera de jugar, son fuertes y buenos...”, advirtió Flick después de que el Barça sumara un punto de los últimos nueve en la Liga, ya con el primer puesto en la clasificación en manos del Real Madrid. El cuadro de Ancelotti está a cuatro puntos y tiene dos partidos menos, el de este domingo frente al Getafe y el aplazado por la dana ante el Valencia. “Hay que aceptar que el mes de noviembre ha sido malo. Debemos confiar que sea diferente en diciembre”, añadió el alemán. “Hemos bajado el nivel de lo que estábamos haciendo y eso nos está complicando los partidos”, sumó Raphinha.

Raphinha, muy crítico: “Estamos haciendo muchas cosas mal”

Es paradójica la situación del Barcelona de Flick, en el momento en el que comienza a recuperar jugadores (Gavi, Ferran Torres, Eric García y De Jong), el Barcelona no encuentra respuestas desde el banquillo. Frente a Las Palmas, cuando el duelo se le atragantaba, Flick mandó al campo a De Jong y Ferran Torres, también a Héctor Fort y Pau Víctor. Pero nada. Si hasta el fútbol extraordinario de Lamine Yamal se mostró ordinario ante Las Palmas. “No quiero individualizar, pero los partidos se ganan por el equipo, siempre. Necesitamos recuperar buenas conexiones entre la defensa y el ataque”, defendió Hansi Flick. “Estamos haciendo muchas cosas mal, soy crítico. Estoy enfadado. Tenemos que darle la vuelta a esto”, expuso Raphinha, que marcó su noveno gol en la Liga. “No me importa nada el gol, me importa la victoria. No ganamos y no salgo satisfecho con el partido. Queríamos ganar y eso es lo que importa”, completó el brasileño.

Ferran Torres, en cambio, fue menos incisivo. Más cerca del optimismo de Hansi Flick que de la rabia de Raphinha, el delantero valenciano analizó: “Es cierto que hicimos un inicio temporada espectacular y han venido dos partidos malos, pero no creo que estemos en una dinámica mala. Son cosas puntuales. Somos capaces de darle la vuelta a esta situación”. Y remarcó el subibaja en el que está envuelto el Barça desde que tomó el Santiago Bernabéu: “Ya lo hemos hecho más de una vez. Tenemos que limpiar la cabeza y pensar en el próximo partido”.

El Barcelona visitará Mallorca el próximo martes 3 de diciembre y continuará sus viajes lejos de Montjuïc frente al Betis (7 de diciembre) y ante el Borussia Dortmund (11 de diciembre). Cerrará el año con dos partidos en casa: Leganés (15 de diciembre) y Atlético de Madrid (21 de diciembre). “Es simple: no hemos sabido marcar. Somos los líderes de la clasificación y los rivales nos juegan de esta manera. Para ganar tienes que marcar goles y no hemos jugado como al principio de temporada”, concluyó Flick. A la espera de un nuevo regreso de Dani Olmo —tiene molestias—, el Barcelona se pierde en una ciclotimia que ni Lamine Yamal puede contrarrestar.