De la Fuente y el contrato acorde a su caché que nadie se atreve a firmar

Hay entrenadores con vínculos tan estrechos y leales a una entidad que habitualmente se les denomina “hombres de club”. A Luis de la Fuente le ocurre algo similar con la selección. El técnico es un “hombre de la federación”, vinculado primero a la Rojita (2013-2022) y después a la Roja (desde 2023), ha sido siempre cumplidor con las normas institucionales, enemigo de las polémicas y de los titulares que acaban en portada. Por eso, llamó la atención cuando De la Fuente puso sobre el escaparate su contrato con la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). “No sé si me estoy tirando a la piscina al decir que esta RFEF podría legalmente haberlo cerrado ya”, expuso De la Fuente sobre su contrato pactado pero no firmado con Pedro Rocha, expresidente de la Federación, hoy inhabilitado por el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD). “Realmente no me importa esperar hasta el nuevo presidente, pero para la tranquilidad de todo el mundo...”, añadió el técnico en una entrevista en la Cadena Ser. Luego, fiel a sus formas, tiró de optimismo: “Estoy seguro de que se arreglará”.

Cuando Luis de la Fuente tomó el testigo de Luis Enrique tras el fiasco de España en el Mundial de Qatar, el entonces presidente de la Federación, Luis Rubiales, le firmó un contrato de dos temporadas, más otras dos opcionales. De la Fuente sorteó la crisis institucional que significó la polémica salida de Rubiales y contestó con títulos: ganó la Nations League en 2023 y la Eurocopa en 2024. Sus números al frente de la Roja son de 20 victorias en 24 partidos, con dos empates y dos derrotas. “Estoy encantando como seleccionador. Lo que sí deseo es que este problema se solucione cuanto antes, lo digo de corazón, por el bien del fútbol español, por la estabilidad, por la tranquilidad y porque se resuelva mi contrato también, lógicamente. Estoy feliz, pero creo que se deben cerrar las cosas cuando se hablan”, insistió el preparador de la absoluta.

Antes de la Eurocopa, a De la Fuente le renovaron el acuerdo para que siguiera esos dos años más que establecía la cláusula de su contrato. Es decir, la Federación quería al técnico al frente de la Roja hasta el Mundial de Estados Unidos, Canadá y México. Su contrato, según aseguran en la RFEF, aumentó. “No mucho, pero su sueldo mejoró”. De la Fuente, en cambio, no defiende lo mismo. “Hasta después del Mundial tengo mi contrato como mi staff. Mi equipo técnico ha mejorado sus condiciones, pero yo tengo las mismas que cuando me subieron del equipo sub-21. Tengo contrato de alto ejecutivo y no de seleccionador de máximo nivel”, reveló Luis de la Fuente.

Según fuentes de la Federación, después de que España se subiera a lo más alto del podio en Berlín, el presidente interino Pedro Rocha le aseguró a De la Fuente que su contrato se mejoraría sustancialmente. En definitiva, que tendría un sueldo acorde a su caché. Pero el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) suspendió a Rocha, justamente por excederse en sus funciones cuando lideraba la comisión gestora que reemplazó a Luis Rubiales. Entonces, ese nuevo vínculo apalabrado quedó en el aire. “De justicia sería que se hubiese cumplido ya, pero ha habido presiones de todos lados a las personas que tienen que tomar este tipo de decisiones. Hay muchos que no han querido extralimitarse por miedo a una posible inhabilitación. Estoy muy tranquilo y quiero que se tome una decisión con seguridad. Soy feliz, pero quiero seguir siéndolo”, añadió el técnico, que, además de los dos títulos que consiguió con la absoluta, ha ganado una plata olímpica en Tokio con la sub23 y dos europeos con la Rojita, uno con la sub19 en 2015 y otro con la sub21 en 2021. Bajo su conducción en la absoluta, la Roja se volvió a ganar el corazón de la afición. “Lo dije cuando llegué y yo sí siento la identificación, el apoyo y el sentimiento de la gente por la Selección. Desde el primer momento lo he pedido y añoro ese sentimiento de identidad con el equipo nacional”, subrayó De la Fuente. Un vínculo que se había deteriorado durante la etapa de Luis Enrique.

A la espera de que solucione (de una vez) el conflicto político en la Federación —habrá elecciones cuatrienales a la asamblea y a la presidencia de la Real Federación Española de Fútbol antes de que finalice el actual ciclo olímpico, que concluye el 31 de diciembre de 2024—, De la Fuente no se deja tentar. “Tengo oportunidades y ofertas, como es normal. Lo raro sería que el vigente campeón de Europa no las tuviese, lo que no es normal es que un campeón de Europa esté sin contrato. No pasa nada, pero es así. Antepongo jugar un Mundial con España antes que cualquier oferta”, afirmó el técnico. En la Federación, sin embargo, no coinciden con esta afirmación. “Contrato tiene. No es que esté en una situación ilegal”, concluyen fuentes de la Ciudad de Fútbol de Las Rozas.

Ambas partes, en cualquier caso, entienden que el problema se solucionará. Para mí es un orgullo dirigir a la selección de mi país, soy un privilegiado. Nunca había pensado en estar donde estoy. Pero después de lo que se ha conseguido y de la manera en que se ha conseguido, que se ponga en valor”, concluyó el técnico de España. Y esa es la idea en Las Rozas, el problema es que todavía no saben quién ejecutará el nuevo contrato de De la Fuente. Ese contrato que nadie se atreve a firmar.