Rivales de todos los colores en la nueva Champions: “El primer objetivo de este formato es que el Real Madrid no gane”

Presentado con fastos destinados a anunciar una nueva era en el fútbol europeo de clubes, el sorteo de la próxima Champions League deparó la mezcla esperada del aumento de grandes enfrentamientos con partidos de menor calado que propicia el nuevo formato. Ya no hay fase de grupos, sino una liga de 36 en la que cada equipo se enfrenta a otros ocho, cuatro partidos en casa y cuatro fuera. Los ocho clubes con mayor puntuación pasan a octavos de final directamente y del noveno al vigésimocuarto jugarán una eliminatoria de dieciseisavos. Los 12 últimos de esta primera fase darán por cerrada su participación europea porque ya no caen a la Liga Europa.

El nuevo modelo de competición reclamaba mucho la atención entre los representantes de los clubes sobre los partidos a jugar fuera de casa. El ordenador, activado por Cristiano Ronaldo y Buffon, deparó como salidas complejas que el Real Madrid visitará Anfield, el Barcelona Dortmund y el Atlético y el Girona viajarán a París para medirse al PSG. El nuevo sistema también propicia que equipos de un mismo país compartan rivales. El Barca y el Madrid, por ejemplo, se enfrentarán al Dortmund, al Atalanta y al Brest. “El primer objetivo de este nuevo formato es que no gane el Real Madrid”, bromeó Buffon. Más ponzoñoso y político fue el anuncio de la UEFA sobre esta nueva Champions, con el propio Buffon, Ibrahimovic y Alexander Ceferin en el reparto de actores. El mandamás del fútbol europeo dijo “eso nunca va a pasar” cuando el atacante sueco estaba a punto de decir que el nuevo formato es una Superliga.

Como toda novedad, la nueva Champions genera incertidumbre para pronósticos o para saber si enganchará o no a los aficionados. El mayor número de partidos entre los grandes juega a su favor y también el mismo morbo de las ligas domésticas de mirar la clasificación. Está por ver el desarrollo de esta primera fase porque una de las dudas que admiten hasta miembros del Comité Ejecutivo de la UEFA es qué pasará si en las últimas jornadas hay demasiados partidos intrascendentes o en los que uno de los dos equipos no se juegue nada. A vuela pluma y por nombre se puede decir que el Girona fue el menos favorecido con el sorteo. Arsenal, Liverpool, PSG y Milan aguardan a los de Míchel.

Real Madrid

El Madrid empieza a buscar su 16ª Copa de Europa donde terminó la 15ª. El primer rival que le deparó el sorteo, aunque quizá no sea el primero contra el que juegue, fue el Borussia Dortmund, el finalista al que derrotó el pasado 1 de junio en Wembley. El camino del último campeón es un regreso a sus últimas finales. Además de recibir al Dortmund en el Bernabéu, visitará en Anfield al Liverpool, contra el que levantó sus dos Champions anteriores, la de 2022 en París y la de 2018 en Kiev.

Ancelotti ya no tendrá enfrente a Jürgen Klopp, particularmente martirizado por el Madrid, al que nunca venció y contra el que se le escaparon dos orejonas. Su lugar lo ha ocupado el neerlandés Arne Slot, que ha conservado el impulso atacante y la plantilla, a la que acaba de añadir al italiano Chiesa.

También encontrará cambiado el banquillo del Dortmund. Terzic dimitió tras la final de Wembley y su lugar lo ocupa Nuri Sahin, exjugador precisamente del Madrid. El equipo ha perdido además a varios futbolistas fundamentales, como Füllkrug, traspasado al West Ham; Hummels, que está sin equipo y Sancho y Matsen, cuyas cesiones vencieron. Para cubrir esas ausencias ficharon a dos delanteros (Beier y Guirassy), al central Anton, y obtuvieron la cesión del City de Yan Couto, que brilló en el Girona. Además de con sus rivales de las últimas tres finales de Champions, el Madrid volverá a jugar contra el de su último título, el Atalanta, al que ganó la Supercopa de Europa el 14 de agosto. Cuando Ancelotti llegue a Bérgamo ahí sí que seguirá Gasperini, empeñado en recomponer el único equipo capaz de derrotar la temporada pasada al Bayer Leverkusen de Xabi Alonso. El veterano técnico sigue digiriendo la marcha a la Juventus del que consideraba su futbolista más importante, Koopmeiners, a quien dejó fuera de la lista de la Supercopa cuando supo que se iría.

El sorteo, que le cruzó también con el Salzburgo, dejó más reencuentros jugosos. Como con el Milan, el segundo equipo con más Copas de Europa (7), donde recaló este verano Morata, canterano blanco. El Madrid es el equipo al que más goles ha marcado, seis, según Opta,

como el de los hermanos Mbappé. Cuando Kylian firmó por el Real, Ethan, de 17 años, también dejó el PSG rumbo al Lille, en cuyo estadio se medirán. No será el único viaje a Francia del Madrid, que jugará contra el sorprendente Brest, tercero el año pasado en la Ligue 1. El encuentro tendrá que disputarse a algo más de 100 kilómetros de allí, en Guingamp, una localidad de 6.000 habitantes.

Barcelona

El desafío del Barcelona en la liguilla de la Champions pasa por la vía alemana: el Borussia Dortmund y el Bayern Múnich. Atalanta, Young Boys, Brest, Benfica, Estrella Roja y Mónaco completan los duelos del equipo de Hansi Flick en la primera fase de la Liga de Campeones.

No tiene rival más duro la entidad azulgrana que el gigante alemán: el Bayern Múnich. La historia, sin embargo, no ilusiona al Barça. Se han enfrentado al Bayern en 15 oportunidades y solo ha conseguido dos victorias, en ambas ocasiones con Leo Messi en la plantilla, en 2009 (4-0, con dos goles del argentino) y en 2015 (3-0, también con otro doblete del 10). El resto de los enfrentamientos, dos empates y 11 victorias para los alemanes, ninguna tan dolorosa para los barcelonistas como el 2-8 en Lisboa en la Champions de la pandemia. En aquella oportunidad, en el banquillo del Bayern estaba Hansi Flick, hoy el líder del vestuario del Barcelona. Esta campaña se estrena Vicent Kompany como entrenador de un Bayern, que se renueva —fichó a Olise, Palhinha e Ito—, pero que nunca pierde su nivel competitivo, siempre duro en Europa, ahora en la búsqueda de recuperar el cetro en la Bundesliga. Al menos, una buena noticia para el Barcelona, frente al Bayern se jugará en Montjuïc.

Frente al Dortmund, en cambio, el Barcelona se trasladará a Alemania. Hay pocos estadios en Europa más calientes que el Signal Iduna Park, con capacidad para más de 80.000 espectadores. En cualquier caso, tampoco serán dulces los desplazamientos a Lisboa (Benfica), Belgrado (Estrella Roja) y Mónaco. “Como club siempre optamos a lo máximo, a lo más alto, porque somos un muy buen equipo, en crecimiento”, valoró Bojan Krkic, miembro del consejo de fútbol del Barcelona, este jueves portavoz del club en el sorteo de la Liga de Campeones.

En Montjuïc, a la espera de que el Barcelona regrese al Camp Nou a principios del año que viene, los azulgrana recibirán, además de al Bayern, al Atalanta, al Young Boys y al Brest. En principio, no se avecina una primera fase compleja para el Barcelona de Hansi Flick, líder de la Liga después de cerrar los tres primeros partidos con triunfos. Ocurre, sin embargo, que el Barça no levanta la orejona desde 2015 y en 2021 y 2022 descendió a la Europa League. También sin éxito. “El equipo y el staff técnico han iniciado la temporada a un nivel alto”, prosiguió Bojan. Y remató: “Queremos devolver la ilusión a la afición y demostrar que el Barcelona es un rival con el que los equipos que se enfrenten a nosotros no estarán contentos”. El Barça, primero, tendrá que sortear a los duros equipos alemanes.

Atlético de Madrid

“Es una exigencia, una necesidad y un compromiso estar entre esos ochos primeros”, advirtió Enrique Cerezo, presidente del Atlético de Madrid. El listón se lo han puesto alto a Diego Pablo Simeone, que tendrá que afrontar batallas tácticas de altura contra Xabi Alonso y Luis Enrique. A este último tendrá que visitarlo en París para medir al PSG pos-Mbappé, con el morbo de que el preparador asturiano llegó a comprometerse con el Atlético antes de la llegada del técnico argentino. También el nombre de Luis Enrique ha sonado con fuerza cuando en tiempos de crisis agudas en los despachos del Metropolitano buscaron un reemplazo para Simeone. A Xabi Alonso y su impactante Bayer Leverkusen, vigente campeón de la Bundesliga y de la Copa alemana, lo recibirá el Atlético en el Metropolitano. El conjunto alemán, con su exitoso director general español Fernando Carro a la cabeza, ha mantenido al bloque campeón y se ha reforzado con Aleix García y un combo francés, el extremo Terrier y el central Belocian, por los que ha pagado 35 millones de euros al Stade de Reims.

Hay una tónica muy generalizada en los rivales del Atlético. Además de Luis Enrique y Xabi Alonso, los técnicos del Benfica, Roger Schmidt, al que visitará en Lisboa, y el del Leipzig, Marco Rose, también son seguidores del nuevo paradigma futbolístico que se ha impuesto. Lo mismo se puede decir de Pepijn Lijnders (Salzburgo) que fue el segundo entrenador de Jürgen Klopp y ha apostado por Vermeeren, descartado por Simeone. La cita será en la alpina localidad austriaca, Hasta el entrenador del Lille, Bruno Genesio, también tiene una propuesta ofensiva, de presión y transiciones rápidas. Al equipo francés y al Slovan de Bratislava los recibirá el Atlético, mientras que viajará a Praga para medirse al siempre correoso Sparta.

Girona

Al entrenador del Girona, Míchel, le gustan los retos. Así lo demostró en la previa del sorteo de la Champions, en la víspera del duelo entre el Girona y Osasuna en Montilivi. “Ya lo dije en su día, el sueño de jugar la Champions ya es increíble. Me encantaría ir a Anfield. Y también me gustaría recibir en Montilivi a algún equipo histórico como el Bayern o la Juve… Son rivales que a nuestra afición les haría ilusión recibir”, expuso el preparador madrileño. El Girona no viajará a Anfield, pero sí recibirá al mítico equipo inglés, hoy en proceso de reinvención, en Montilivi. Además, como si fuera poco glamour el del Liverpool, a Girona llegarán el Arsenal, el Feyenoord y el Slovan Bratislava.

El equipo del norte de Londres regresa a la Liga de Campeones después de siete temporadas. Comandado por el español Mikel Arteta, el Arsenal peleó la pasada Premier League con el Manchester City, campeón de las últimas cuatro ligas inglesas. Este verano, el Arsenal se reforzó con el defensa Calafiori y con el centrocampista español, campeón de la Eurocopa 2024, Mikel Merino.

El Girona viajará a París para medirse al poderoso PSG, verdugo del Barcelona y semifinalista de la última edición del torneo. Se tendrá que desplazar, también para visitar al Milan, al PSV y al Sturm Graz. “Evidentemente, a priori, somos muy inferiores a nuestros rivales”, se arrancó Pere Guardiola, presidente y accionista de la entidad gerundense. “Pero”, añadió, “lo tendremos que ver. Como el míster decía, vamos a por ello”. Será la primera participación del Girona en la Liga de Campeones después de solo cuatro temporadas en Primera. Estreno soñado, sí; pero también complicado para el conjunto catalán. “Lo único que les pido a los jugadores es ser competitivos porque el objetivo nuestro es la Liga. Para que este club siga dando pasos hacia adelante tenemos que continuar en Primera”, resolvió un prudente Míchel. “Hemos tenido que ponernos todos a una para intentar tener un equipo competitivo. Confiamos muchísimo en Míchel. Tenemos que ser humildes, ir paso a paso e intentar hacerlo con ganas y con ímpetu”, concluyó. El Girona se estrena con equipos de pedigrí en la Champions, pero con la mirada en la Liga.

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