El fútbol alemán cierra la puerta a la inversión privada

La Liga Alemana de Fútbol (DFL), el organismo que gobierna las competiciones profesionales alemanas, se rindió a la presión de los aficionados. Las protestas continuadas en los estadios, la interrupción sistemática de partidos en juego mediante el lanzamiento de objetos a la cancha, puso una barrera insalvable contra la entrada de fondos de capital privado en los clubes. La DFL anunció este miércoles que dará marcha atrás a la legalización de la entrada de capital privado, convirtiendo al fútbol alemán en un caso único en Europa. Un santuario en el que los socios conservan el control mayoritario de las sociedades deportivas.

En su reunión extraordinaria celebrada este miércoles en Fráncfort, la directiva de la DFL decidió por unanimidad frenar en seco lo que ya había aprobado en diciembre. “Dados los acontecimientos actuales, ya no parece posible una continuación exitosa del proceso”, señaló el portavoz, Hans-Joachim Watzke, presidente del Dortmund.

Watzke indicó que, aunque una gran mayoría de directivos está a favor de la necesidad empresarial de una asociación estratégica, la decisión previa de abrir la puerta a inversores privados ha generado “grandes disputas” no sólo entre clubes, sino entre clubes y jugadores, entrenadores, directores, órganos de supervisión, asambleas generales y comunidades de aficionados.

En las últimas semanas hubo que interrumpir partidos de la liga durante varios minutos. A veces, incluso en distintos momentos a lo largo de los 90 minutos, porque los hinchas tiraron objetos al campo como pelotas de tenis y hasta coches teledirigidos, en protesta ante lo que vislumbran: si los fondos como CVC entran en el negocio, todo será dirigido desde corporaciones externas a los clubes.

Watzke recalcó que el frenazo pone en peligro el financiación de la liga y la viabilidad de la competición. “Dadas las circunstancias, ya no se puede garantizar la viabilidad de una conclusión exitosa de un contrato para la financiación de 36 clubes de la liga”, indicó el portavoz.

La decisión aperturista tomada en diciembre por la DFL se adoptó con una mayoría de dos tercios. Pero el voto decisivo fue del gerente del Hannover 96, que está en Segunda. Martin Kind, quien aparentemente no cumplió las directrices de su propio club de votar en contra, votó a favor de la entrada de CVC.

El comunicado de la liga alemana fue una mala noticia para Javier Tebas, presidente de la liga española, que promovió la oportunidad de asociar el torneo español con una Bundesliga abierta a CVC. “LaLiga está llevando a cabo un estudio para ver si valdría la pena en ciertos mercados si nosotros y la Bundesliga u otras ligas cooperáramos en la comercialización de nuestros derechos televisivos”, afirmó Tebas este miércoles en declaraciones al semanario alemán Sport Bild.

Tebas, a favor del ingreso de CVC en Alemania

El presidente de la patronal española defendió que una asociación comercial entre LaLiga y la Bundesliga les podría permitir a ambas competiciones “competir mejor con la Premier League”. LaLiga repartió 1.525 millones de euros por derechos televisivos en la temporada 2022-2023, mientras que la Premier ha vendido estos hasta 2029 por casi 2.000 millones al año. Tebas valoró la colaboración de LaLiga y el fondo de inversión CVC, una asociación “muy buena”.

“No sólo dan dinero, sino que aportan experiencia y conocimiento”, explicó Tebas. “Si a CVC le va bien, a nosotros también. Porque nos llevamos el 92% de los ingresos generados”, explicó sobre el último candidato para convertirse en inversor de la Bundesliga, y contra el que protestan los aficionados alemanes. “Para mí, el mercado televisivo alemán es un gigante dormido. Como país más pequeño y con menos ingresos, Inglaterra tiene casi el doble de ingresos televisivos que la Bundesliga”.

La Bundesliga, de momento, exhibe músculo gracias a sus números. La DFL publicó este miércoles las cifras de la asistencia a los estadios. En la Bundesliga, una media de 31.627 hinchas; en la Liga, 30.619; en la Segunda División alemana 29.699; y en la Serie A 27.785 espectadores.

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