Ancelotti: “Kroos es insustituible también cuando no juega”
El entrenador del Real Madrid valora las cualidades únicas del alemán, que abre el triunfo ante el Granada
En el 1-0, medio Madrid se fue a abrazar a Kroos y otro medio, a Brahim, el autor del tanto. El pie derecho del alemán sigue gobernando partidos, ya sean duros o de carril, como este ante el raquítico Granada, que se fue de Chamartín con un tirito intrascendente en el minuto 90 y un cálculo de goles esperados de 0,01. En un páramo de fútbol, Brahim le invitó a una pared al teutón y el medio le devolvió un pase filtrado con matasellos para calentar una tarde helada en el Bernabéu, de grados y de juego, y entregarle el gol. “Un pase mágico de Toni, que ve lo que nadie ve”, le ensalzó Brahim, que en la celebración le hizo una reverencia. “El pase no ha sido tan espectacular”, respondió el aludido con esa distancia tan suya. Sin levantar la voz, el discurso que sigue dirigiendo al equipo blanco es el de Kroos.
¿Qué lo hace único?, le preguntaron en sala de prensa a Carlo Ancelotti, que sacó la lista de elogios. “No falla pases, siempre elige la mejor solución, quiere el balón, no tiene miedo a la presión y lo que mejor hace es que se orienta muy bien. Es insustituible también cuando no juega”, abrochó el italiano. Ante el Granada, Kroos se apuntó su quinta asistencia del curso en Liga y fue, con mucha diferencia, el que más pases dio del Madrid (132), su registro más alto en un encuentro del campeonato, según Opta. Y, de postre, acabó la tarde con el mayor número de recuperaciones de su equipo (nueve). “No juego para mí, lo hago para mejorar a los demás”, concluyó el alemán.
Él asistió para el tercer gol de Brahim, que ha pasado del altillo donde se guarda lo que no se usa, a aparecer de forma frecuente, beneficiado por las lesiones, su tajo y su don de la oportunidad ante la portería rival. Ha marcado el 1-0 en tres de los cuatro partidos como titular (Las Palmas, Braga y Granada). Solo se ausentó en la goleada al Valencia. Ante los andaluces, se estrenó en el Madrid como medio, en lugar de Ceballos, y además de su habitual primer tanto se marcó un gran pase de tacón a Bellingham, que el inglés mandó fuera, y abrió el camino para el 2-0 de Rodrygo. “Cumple en cualquier posición. No ha tenido demasiado protagonismo al principio, pero ahora está mostrando todas sus cualidades”, concedió el de Reggiolo.
El central del Granada Ignasi Miquel le supera casi en 20 centímetros a Brahim (1,89 frente a 1,70), pero el cuerpo menudo del ex del Milan pudo con su rival para ganarle un cuerpo a cuerpo y buscar a Bellingham, que hizo algo desconocido desde que está en el Madrid: fallar la segunda ocasión delante del portero. El rechace lo aprovechó Rodrygo, que anotó por quinto partido consecutivo. “Si estás bien, marcas por la derecha, por el centro y por la izquierda”, zanjó Ancelotti, que mandó un mensaje de agradecimiento al esfuerzo común. “Lo que más me gusta es el compromiso colectivo. Eso nos permite mantener la portería a cero”, subrayó.
La única inquietud de la tarde para el Madrid fue la sobrecarga en el soleo izquierdo de Dani Carvajal, sustituido en el descanso por Lucas Vázquez. Este lunes está previsto que le hagan pruebas médicas para saber el alcance de la lesión y si puede llegar a tiempo para el duelo del próximo sábado a domicilio contra el Betis. Para esa cita, Ancelotti espera recuperar a Modric y también a Kepa. Si nada cambia, se acabó, al menos de momento, el tiempo de Lunin. “Mis dedos hoy se congelaron”, aseguró el portero ucranio tras un choque sin ningún exigencia para él.
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