Kai, la mediática nieta de Donald Trump que se cuela en la élite del golf

Se llama Kai Trump, tiene 18 años y es la mayor de los 10 nietos del presidente de Estados Unidos. Su padre es Donald Trump Junior. Su madre, Vanessa, mantiene una relación sentimental con Tiger Woods. Con ocho millones de seguidores entre Tik Tok, Instagram, YouTube y X, es una estrella en las redes sociales. Cada imagen o vídeo que publica se vuelve viral. Participó en la campaña electoral de su abuelo para captar el voto joven. Tiene su propia marca de ropa, que publicita en la Casa Blanca. Y es una golfista amateur que este jueves debuta en un torneo del circuito americano, la élite mundial, gracias a una invitación de patrocinio.

El deporte, la política y el universo mediático se unen en Kai Trump, la alumna del instituto Benjamin, en Palm Beach, Florida, que el próximo año estudiará y jugará en la Universidad de Miami. De momento tendrá la ocasión de codearse con las mejores golfistas del planeta, como Nelly Korda, en The Annika, cita del LPGA, el tour estadounidense, que también disputan las españolas Carlota Ciganda, Azahara Muñoz y Julia López. El torneo le ha concedido una “exención de patrocinador” para “hacer crecer el juego del golf entre audiencias más jóvenes y diversas”. Y ahí Kai Trump es un filón, acostumbrada a subir al atril en la Convención Republicana para defender las ideas de su abuelo antes de los pasados comicios. “Para mí es solo un abuelo normal, nos da refrescos y caramelos cuando nuestros padres no miran”, bromeó. El presidente estadounidense apoya económicamente al torneo que ha invitado a su nieta y que reparte 3,25 millones de dólares en premios.

La estrecha relación de Donald Trump con el golf se ha extendido a Kai, jugadora en la American Junior Golf Association (461ª clasificada) y que cuenta como caddie con Allan Kournikova, hermano de la famosa extenista. Su gancho es mucho más mediático que deportivo. En la cancha no brilla entre las mejores. Pero fuera arrasa. Su canal de YouTube (1,35 millones de suscriptores) contiene por ejemplo un vídeo de 28 minutos en el que muestra cómo vivió un día junto a su abuelo en la pasada Ryder: desde el viaje en el Air Force One a los donuts de postre en la cena. En otra publicación en X posa en la Casa Blanca vistiendo unas sudaderas con sus iniciales, KT, a 130 dólares la prenda. O luce el regalo de su abuelo por su cumpleaños, un Tesla de 100.000 dólares. También contó desde dentro la noche electoral en la que Trump ganó las últimas elecciones y el lanzamiento de un cohete de SpaceX junto a Elon Musk.

El LGPA se frota las manos con Kai. “Este torneo está generando una atención inédita. Las cifras en redes son espectaculares. Esto hace crecer al golf femenino”, celebra Justin Sheehan, director de operaciones del club. “Encaja con nuestra misión de empoderar a las mujeres”, añade la leyenda sueca Annika Sörenstam, anfitriona de la cita. A Kai no le faltan los consejos: “Mi abuelo no puede venir a verme porque está ocupado dirigiendo el mundo. Me ha dicho que no me ponga nerviosa. Y Tiger, que disfrute”.