El jugador de béisbol dominicano Juan Soto firma un contrato récord de 765 millones de dólares con los New York Mets

El dominicano Juan Soto ha firmado el mayor contrato en términos absolutos de la historia del deporte. La estrella de los Yankees de Nueva York ha fichado por 15 años por los rivales de la misma ciudad, los New York Mets, por un total de 765 millones de dólares (unos 725 millones de euros), en un acuerdo que incluye cláusulas que pueden elevar el total hasta los 805 millones de dólares, según adelantó este domingo el New York Post y confirmaron luego diversos medios estadounidenses. Soto se traslada del Bronx a Queens, provocando un terremoto en el béisbol neoyorquino.

El contrato firmado por el jugador nacido en Santo Domingo (República Dominicana) supera en cifras absolutas el del japonés Shohei Ohtani, de 30 años, que firmó el año pasado por 10 años por Los Angeles Dodgers por un total de 700 millones de dólares.

El contrato de Ohtani incluía un diseño de ingeniería financiera con pagos diferidos que permitía que computase como de 46 millones de dólares por temporada (aunque la cifra real fuese de 70). El de Soto no incluye esos diferimientos y contabilizará por 51 millones de dólares anuales a los efectos de límites salariales y otras reglamentaciones de la MLB.

Soto tiene 26 años, con lo que queda ligado con los Mets hasta los 41, aunque el contrato también incluye previsiones de posible vencimiento anticipado. En el béisbol, los jugadores pueden rendir a alto nivel hasta edades más avanzadas que en otros deportes, lo que facilita los acuerdos de larga duración, aunque este es el más amplio. Su duración supera el de 340 millones de dólares por 14 años que Fernando Tatis Jr. tiene con San Diego hasta 2034.

Juan Soto había terminado contrato con los Yankees y era la gran estrella libre de la MLB, las Grandes Ligas de béisbol. Varios equipos estaban interesados en su contratación, incluidos los Boston Red Sox y los Toronto Blue Jays. Los Yankees intentaron retenerlo sin éxito. Según fuentes citadas por AP, su oferta final fue de 760 millones de dólares por 16 años, con un diseño que le daba un valor medio anual de 47,5 millones de dólares.

El dominicano, cuatro veces All Star, llega así a su cuarto equipo de la MLB. Debutó en la competición el 20 de mayo de 2018 con los Washington Nationals, convirtiéndose en el jugador más joven de las Grandes Ligas a los 19 años y 207 días, y el primer jugador nacido en 1998 en aparecer en un partido. Con su característico estilo de bateo, con un ritual de balanceo que mezcla el rito y la superstición con el intento de desconcentrar a los lanzadores rivales, pronto dio muestras de su calidad y ayudó a los Nationals a conquistar la Serie Mundial el año siguiente.

En 2022 rechazó la oferta de Washington de un contrato de 440 millones de dólares por 15 años y fue traspasado ese agosto a San Diego en una operación con varios jugadores involucrados. Tras la muerte del propietario de los Padres, Peter Seidler, fue traspasado a los Yankees en diciembre de 2023 para cumplir su último año de contrato por 31 millones de dólares. En el nuevo acuerdo cobrará una prima de fichaje de 75 millones de dólares, pagadera cuando la oficina del comisionado de la competición apruebe el fichaje.

Soto fue clave para que los Yankees alcanzasen esta temporada la final de la competición, la Serie Mundial. Conectó el home run decisivo para que los Yankees, el equipo más laureado de las Grandes Ligas, llegasen a su primera final desde 2009. Sin embargo, cayeron derrotados precisamente ante los Dodgers de Ohtani. El japonés cerró una temporada histórica de 50 cuadrangulares y 50 bases robadas, aunque quedó eclipsado en las finales por Freddie Freeman, elegido de forma unánime mejor jugador después de conectar cuatro home runs en partidos consecutivos.

Soto tiene una media de bateo de 0,285, con 201 home runs y 592 carreras impulsadas en siete temporadas en las Grandes Ligas. Llega a los Mets, que cayeron en la final de la Liga Nacional contra los Dodgers.

El fichaje del dominicano aún no se ha hecho público porque su formalización está a la espera de un reconocimiento médico.