La reivindicación de Xavi

Xavi Hernández respira tranquilo después de su primer título como entrenador del Barcelona. También lo hace el presidente Joan Laporta, que ha abierto las vitrinas por segunda vez desde que regresó a mandar en el Camp Nou. La victoria en el clásico ante el Real Madrid en la Supercopa de España regatea la tormenta siempre latente en el barcelonismo, sobre todo después de que el Barcelona se pasara un año y medio sin títulos, mismo periodo desde que se firmó el adiós de Lionel Messi. La paz, en cualquier caso, ya se olía en la Ciudad Deportiva Joan Gamper. El vestuario se entrega al técnico catalán, incluso hasta cuando Xavi sorprende al grupo con el plan de partido, como fue el caso en la final de Arabia Saudí ante el Madrid.

Xavi no quería dar pistas a Carlo Ancelotti y antes del clásico no habló con sus jugadores de la idea que tenía para contrarrestar la estrategia del italiano. Con un sistema inédito desde que aterrizó en el banquillo azulgrana, el preparador catalán encontró la fórmula para proteger a Busquets, potenciar a De Jong, liberar a Pedri y hacer lucir a Gavi. “No es tan ordenado como Pedri, por eso lo colocamos en la banda y a Pedri por el medio. Contra el Atlético no pudimos hacer lo mismo porque no estaba Lewandowski”, subrayan desde la Ciudad Deportiva.

De hecho, su dibujo llamó la atención de algún futbolista que se imaginaba en el césped desde el inicio del duelo en Riad. El técnico del Barça, en cualquier caso, busca compensar cualquier tipo de cara larga en el camerino con largas charlas con sus muchachos. “Te explica por qué juegas, por qué no juegas. Está muy encima de nosotros”, explica uno de los azulgrana. “En ese sentido, se parece mucho a Luis Enrique, que en el trato con los jugadores es espectacular”, insiste la misma fuente. Desde el staff, sin embargo, matizan: “Esa forma de conectar con los jugadores la aprendió de Luis Aragonés”.

Xavi ejerce de paraguas de los jóvenes. Mientras Pedri y Gavi no bajan a Xavi del póster, el cuerpo técnico azulgrana ha logrado inflar de confianza a Alejandro Balde —en el clásico de la Liga en el Bernabéu, a los jugadores del Madrid les había llamado la atención la poca seguridad del canterano— al tiempo que Araujo es una garantía en la zaga, ya sea de central o, como el pasado domingo, de lateral para silenciar a Vinicius. El delantero del Madrid completó dos regates y solo intentó un centro. Y, entre sus estadísticas más destacadas, ningún remate a puerta ni tampoco ninguna situación creada. Araujo lidera en el campo y preocupa en los despachos. El Barcelona, que continúa con problemas de fair play financiero, todavía no ha podido inscribir el nuevo contrato del central uruguayo que anunció en el pasado mes de abril (el vínculo estirará hasta 2026 y el defensa tendrá una cláusula de 1.000 millones).

La situación de Araujo es similar a la de Gavi. El canterano renovó en septiembre, pero todavía conserva la ficha del filial. “Está previsto que, a final de temporada, hagamos la inscripción de las fichas de Araujo y de Gavi y la renovación de Balde”, aseguró Joan Laporta este lunes por la mañana en RAC1. “La renovación de Balde pinta muy bien, pero tenemos que trabajar para que se nos reconozca el fair play que debemos tener”, añadió el presidente. El club azulgrana pretende aumentar en un 15% el límite salarial. “Como lo pudieron hacer los otros equipos que se suscribieron al acuerdo con CVC”, sostienen en los despachos del Barcelona.

El Barcelona quiere atar al futuro y Xavi recuperar la clase media de la plantilla. “Hay jugadores que tienen que dar un paso adelante. Necesitamos más liderazgo, más futbolistas ganadores”, se quejaban desde el cuerpo técnico. “Para eso tenemos que ganar algún título. Hay muchos de los nuevos jugadores que todavía no ganaron nada con el Barça”, replicaba uno de los pesos pesados del vestuario. El técnico ha logrado recuperar la mejor versión de Ter Stegen (30 años), su insistente apuesta por Dembélé (25) comienza a carburar y el fútbol de De Jong (25) contradice la idea de la dirección de fútbol, que el pasado verano presionaron al neerlandés para que abandonara el club. En el cuerpo técnico no se olvidan de Christensen (26). “Nadie daba un duro por él y es uno de los fichajes que mejor se ha adaptado”, subrayan desde el cuerpo técnico. Todavía, en cualquier caso, no hay manera de enganchar a Ferran Torres (22), Raphinha (26) y Eric García (22). De hecho, los tres han comenzado el último clásico en el banquillo, más de 120 millones de inversión sentados junto a Xavi en Riad.

De los jóvenes a la clase media, Xavi también tiene la llave para amarrar la continuidad de Sergio Busquets. El capitán azulgrana hace tiempo que medita abandonar el Camp Nou cuando finalice su contrato en junio de 2023. Sin embargo, según aseguran en los despachos de la dirección deportiva, Busquets solo se plantea continuar en el club si Xavi sigue al frente del proyecto azulgrana. El pivote, que levantó su primera copa como capitán azulgrana en Riad, se sintió cómodo en el clásico junto a De Jong. “Frenkie es un jugador fantástico. Es muy inteligente tácticamente y tiene ganas de aprender”, elogian desde el cuerpo técnico al neerlandés.

“Este equipo está progresando muy bien. Yo les pido que continúen teniendo la paciencia necesaria para que podamos consolidar un equipo que apunta muy alto. Esto lo vemos todos los culés que hemos vivido épocas gloriosas”, sacó pecho Laporta. El presidente que, de entrada, dudaba del entrenador catalán, ahora se muestra confiado con el trabajo de Xavi. El éxito del equipo le da aire al máximo directivo azulgrana. El técnico, por su parte, responde a Laporta. “Con el presi tengo una relación de amistad, me alegro mucho por él, ha apostado muy fuerte por este proyecto”, dijo. Sabe, en cualquier caso, que su reivindicación solo tiene sentido en el campo. Y, ante el Madrid, ya dio el primer paso. Ahora solo piensa en la Liga. “Es nuestro gran objetivo”, concluyen desde el cuerpo técnico.

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