El juego y el mercado juegan a favor de Gavi

Ha mejorado y mucho el Barcelona respecto a la temporada pasada porque dispone de una plantilla más variada y de mayor calidad e individualmente se ha enriquecido con futbolistas como Lewandowski. El delantero polaco no solo garantiza goles sino que ha asumido el liderazgo de un equipo joven y ambicioso por la presencia de jugadores dispuestos a dar un salto de calidad en vigilias del Mundial de Qatar. Los refuerzos de Koundé y Raphinha, así como la aportación de Christensen y en menor medida Kessié y la recuperación de Dembélé y Ter Stegen, han potenciado al Barça de Xavi. El barcelonismo ha ganado autoestima y confianza y es más respetado por rivales de talla como la Real Sociedad y el Sevilla.

Habrá que seguir la evolución del juego y la renovación de unos liderazgos que de momento han dejado en fuera de juego a capitanes como Piqué y Jordi Alba mientras que Sergi Roberto ejerce de comodín y jugador número 12 y Busquets mezcla a veces con Pedri y en ocasiones con Gavi. El jugador sorpresa del cambio ha sido en cierto modo el juvenil de Los Palacios. A pesar de su condición de internacional español indiscutible a los 18 años, había dudas sobre Gavi por su perfil y también porque su protagonismo parecía circunstancial a la espera de saber el futuro de Frenkie de Jong y Bernardo Silva. El portugués sigue en Manchester y el neerlandés continúa como suplente en el Camp Nou.

Gavi no solo se ha mantenido como titular sino que además mejora con el paso de los partidos, menos presionado que antes, más protegido por los fichajes, distinguido por su entrenador: “Es carácter puro, todo corazón, disciplinado y trabajador, una maravilla. Ha sido el mejor del partido”, resumió Xavi en la sala de prensa del Sánchez Pizjuán después de la victoria del Barça por 0-3. El centrocampista azulgrana fue decisivo en el 0-1, cuando le quitó la pelota a Lamela, y tuvo mucho peso en el desarrollo del encuentro después de cubrir 11 kilómetros, intervenir 52 veces, recuperar el balón en nueve ocasiones por una pérdida y cometer cuatro faltas a cambio de recibir cinco, una estadística que avala su paso por Nervión.

Aunque también quiere pulcritud en el pase, Xavi exige intensidad a sus jugadores, un buen despliegue físico, sobre todo para el repliegue y poder defender mejor, un plan que estimula a Gavi, pendiente todavía de formalizar la renovación de un contrato que acaba en 2023.

“Tenemos tres aviones arriba”, confesó Eric García después de estrenarse como goleador del Barça ante el Sevilla para explicar la manera cómo su equipo desequilibra partidos complicados como el del Pizjuán. Los azulgrana suman 11 dianas y solo han recibido un tanto después del chasco inicial en el Camp Nou contra el Rayo (0-0). Raphinha, Dembélé y Lewandowski marcan las diferencias mientras mejoran las prestaciones defensivas y ofensivas con zagueros como Koundé, asistente por partida doble ante su exSevilla.

También Gavi parece haber encontrado su sitio y entendido su rol en un Barcelona que prioriza las áreas y obliga a los centrocampistas a un doble esfuerzo, en ataque y en defensa, un territorio que favorece las condiciones del joven de Los Palacios. El juego y el mercado juegan por ahora a favor de Gavi.

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