España supera ante Georgia una prueba de carácter
El conjunto de Scariolo vence en Tbilisi por 64-90 con una gran defensa y otro paso al frente de la nueva generación
España aprobó en Tbilisi un examen de carácter. En el duelo contra la anfitriona Georgia estaba a prueba la personalidad de un grupo al que le están saliendo los dientes. Y la selección mordió con la fuerza de mandíbula de quien tiene hambre por comerse el mundo. Después del paseo contra la inocente Bulgaria (114 puntos de botín) en un pabellón casi vacío, el conjunto de Scariolo multiplicaba de repente el reto. Por el ruido en contra de 8.000 espectadores y por el mayor colmillo de su rival. España respondió con juego y fe en otro paso al frente de esta nueva generación con siete novatos en una gran cita.
Si Georgia amenazaba con pinchar por dentro, allí donde a España se le puede intuir alguna costura, Scariolo alineó un quinteto rico en centímetros. López-Arostegui, Joel Parra y los hermanos Hernangómez, los cuatro en la esfera de los dos metros, acompañaron a Lorenzo Brown. Y fue Willy quien ejerció de sostén bajo la canasta propia y de azote en ataque (ocho puntos en el primer cuarto). Cuando se ganó un respiro en el banquillo, Georgia acercó posiciones (15-18). A los chicos de casa, huérfanos de su capitán Shengelia, en la banda con un brazo en cabestrillo por su lesión de hombro, les conducía más el corazón que la cabeza, acelerados, muchas veces buscando el camino más rápido: hasta 24 triples lanzaron en el partido, para nueve aciertos.
El encuentro seguía vivo (25-32) porque a España le costaba cerrar las penetraciones y el rebote en su zona. La ruleta de Scariolo no paraba, cambio tras cambio para mantener el motor a las máximas revoluciones durante toda la noche. El reparto de minutos dibujó esa igualdad de oportunidades: Sebas Saiz fue el que menos jugó con casi 10, y Juancho el que más estuvo en pista con 21. El resto, en ese paréntesis.
Al intervalo se llegó con la selección un cuerpo por delante (31-40) y la sensación de que tenía el triunfo en la mano si continuaba con esas aceleraciones. España retomó el examen con mucha seriedad y con los saltos de Willy (14 puntos y siete rebotes) amplió la renta hasta el 37-51. Georgia seguía dale que dale con los triples, de Sanadze y Mamukelashvili, y el ajetreo de Andronikashvili, pero le sostenía la algarabía del pabellón más que su baloncesto. Aun así rebajó la barrera de los 10 puntos (45-54) y resonaron los tambores de Tbilisi. Era otro de esos momentos para valientes y en España no faltaron quienes pedían el balón. Alberto Díaz con un triple y una falta provocada en ataque, Joel Parra con una poderosa penetración, y un mate tras recuperación de Pradilla (12 puntos y cuatro robos), uno de los meritorios con mejor nota, devolvieron el desahogo a los visitantes. Otro triple de Rudy estiró el colchón hasta el 45-64 y ahí se apagó el incendio de Georgia. Scariolo aplaudió cuando Garuba y Díaz regaron de sudor el parqué tirándose a por un balón y la posesión local se agotó. También por el puñado de asistencias de su tropa (23), y las pocas pérdidas, cuatro, el mejor registro español en un Eurobasket en 25 años.
La renovada España va cogiendo forma. Dos triunfos convincentes (por 27 y 26 puntos) y este domingo (16.15, Cuatro), tercer envite contra Bélgica.
Georgia: McFadden (6), Androkinashvili (13), Bitadze (0), Mamukelashvili (10) y Shermadini (10) —quinteto inicial— Tsintsadze (0), Jintcharadze (2), Burjanadze (6), Bekauri (-), Sanadze (9), Bokoloshvili (5), Berishvili (3).
España: Brown (5), López-Arostegui (9), Joel Parra (8), Juancho Hernangómez (9) y Willy Hernangómez (14) —quinteto inicial—, Jaime Fernández (2), Pradilla (12), Díaz (8), Brizuela (7), Rudy Fernández (8), Garuba (0), Sebas Saiz (8).
Parciales: 16-18, 15-22, 16-31, 17-19.
Árbitros: Lanzarini, Zapolski y Salins.
Segundo partido de la fase de grupos del Eurobasket celebrado en el pabellón Tbilisi Arena (Georgia).
Resultados y clasificación del Eurobasket.
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