Ferran Torres, seis partidos sin marcar un gol para el Barcelona

Por tesón y empeño, también por ambición, Ferran Torres (Foios, Valencia; 22 años) peleó el balón en el área, se revolvió y chutó para marcar su gol ante el Mallorca. Ocurrió que Aubameyang, que estaba en el suelo, la tocó antes de que entrara y el colegiado lo anuló por fuera de juego. El extremo, entonces, se tiró las manos a la cabeza a modo de lamento. Pero la frustración llegó después, cuando Xavi decidió cambiarle a falta de un cuarto de hora. Y, aunque sus registros son más que notables desde que llegara al Barça en invierno —siete goles y seis asistencias—, podrían ser mucho mejores por el volumen de ocasiones que genera y dispone, a la vez que no es la primera ocasión en la que le puede la impotencia. Como sucedió, por ejemplo, ante el Nápoles, cuando abandonó el tapete entre lágrimas porque estaba reñido con el gol. Como ahora.

“Ferran nos da mucho. Abre muy bien el campo, ataca de maravilla los espacios, sabe cuándo tirar hacia dentro, se asocia… A pesar de que está teniendo muchas ocasiones y no acertando alguna, tiene gol”, señala un trabajador de la Ciudad Deportiva; “pero sí que a veces se pone demasiada presión en que debe marcar”. Desde su entorno añaden: “Es muy exigente y eso le ha llevado a donde está. Pero que ahora no le entren no es algo que le tenga muy preocupado porque no es un nueve puro”. Xavi no tuvo ninguna duda tras el duelo ante el Mallorca: “No me preocupa. Ha hecho goles y ha dado asistencias. Está ahí. Estoy muy contento con su trabajo, cómo presiona... y que no frene porque los goles llegarán”.

Sus palabras no son baladíes porque Ferran es titular por definición, toda vez que ha salido de la partida en 21 de los 22 encuentros posibles y es atacante que más minutos (1.778) ha jugado desde su estreno en la Supercopa de España, seguido de lejos por Aubameyang (1.287), Dembélé (1.139) y Adama (661); también el cuarto jugador más utilizado de la plantilla tras Ter Stegen (2.040), Alba (1.917) y Busquets (1.899). “Ferran tiene la capacidad física para jugar cada tres o cuatro días”, aclaró Xavi. Además, está en el contrato verbal —que no escrito— que alcanzaron con el jugador al ficharle del Manchester City. “Serás uno de los jugadores franquicia del club”, le soltó el director deportivo, Mateu Alemany. Lo mismo le dijo Xavi en una conversación telefónica que acabó por entusiasmarle. “Vino para liderar el cambio y lo prefirió a vivir relativamente cómodo en el City”, exponen fuentes de su entorno; “pero esto es un proceso y ahora todos acusan el desgaste de los meses pasados”.

Pero ante el Mallorca ni siquiera le ayudó jugar en la banda derecha —acostumbra a partir desde la izquierda—, lugar en el que se siente más cómodo, por más que después Guardiola lo reubicara de delantero porque entendía que tiene un sexto sentido para saber dónde caerá la pelota. Así, Ferran suma 555 minutos sin marcar, además de seis encuentros sin un solo remate a portería (como ejemplo, solo ha disparado seis veces en los cinco últimos envites) y apenas ha completado tres regates en los últimos 10 intentos. Contra el Mallorca, además, casi no se le vio porque tuvo 30 participaciones por las 88 de Memphis, que jugaba en la banda opuesta. “Tira muchos desmarques, con muy buen criterio, pero le encontramos menos de lo que deberíamos”, matiza un trabajador de la Ciudad Deportiva.

Las actuaciones postreras, en cualquier caso, han llevado al runrún de un Camp Nou que le examina con lupa, ya que costó 55 millones más 10 en variables, ahora que la tesorería del club está escuálida a más no poder. “El precio no es una presión añadida. Nadie se exige más que él”, apuntan desde su círculo. “Hay que estar tranquilos. Esperamos mucho de él porque es un jugador importantísimo para este Barça y su futuro”, resuelven desde el cuerpo técnico. Lo mismo piensa Ferran.