El rearme de Doncic rumbo al ‘All Star’

La precocidad de Luka Doncic le ha generado, desde su adolescencia, paradojas antropológicas, con cuerpo de gigante y cara de niño, y temporales, capaz de contener varias vidas en sus 22 años y múltiples temporadas en apenas cuatro meses de competición en la NBA. Tras superar una complicada puesta a punto después del verano olímpico, una lesión en el tobillo izquierdo que le martirizó en noviembre y diciembre, y el contagio de covid a finales de año, el esloveno sigue puliendo su particular remontada para desmentir cualquier amago de molicie.

Una remontada que, de momento, le llevará al All Star Game, que se disputará el próximo 20 de febrero en el Rocket Mortgage FieldHousede de Cleveland. El tercero en cuatro cursos en la NBA para Doncic, que fue elegido este jueves entre los siete jugadores suplentes de la Conferencia Oeste, junto a Devin Booker (Phoenix Suns), Rudy Gobert (Utah Jazz), Draymond Green (Golden State Warriors), Donovan Mitchell (Utah Jazz), Chris Paul (Phoenix Suns) y Karl-Anthony Towns (Minnesota Timberwolves). El esloveno se une así a Kobe Bryant, LeBron James, Shaquille O’Neal, Isiah Thomas, Kyrie Irving y Anthony Davis en la lista de ilustres con tres Partidos de las Estrellas en su currículo con solo 22 años. Doncic cumplirá los 23 el 28 de febrero.

Jimmy Butler (Miami Heat), Darius Garland (Cleveland Cavaliers), James Harden (Brooklyn Nets), Zach LaVine (Chicago Bulls), Khris Middleton (Milwaukee Bucks), Jayson Tatum (Boston Celtics) y Fred VanVleet (Toronto Raptors) completan la lista de suplentes del Este. Los 14 jugadores suplentes, elegidos por los entrenadores de las 30 franquicias de la NBA, se unen a los 10 titulares seleccionados por aficionados, jugadores y prensa: Stephen Curry (Golden State Warriors), Ja Morant (Memphis Grizzlies), LeBron James (Los Angeles Lakers), Nikola Jokic (Denver Nuggets) y Andrew Wiggins (Golden State Warriors), en el Oeste. Y DeMar DeRozan (Chicago Bulls), Trae Young (Atlanta Hawks), Kevin Durant, (Brooklyn Nets), Giannis Antetokounmpo (Milwaukee Bucks) y Joel Embiid (Philadelphia 76ers), en el Este. Con LeBron y Durant como capitanes por tercer año consecutivo, encargados de echar a pies los equipos.

Doncic, elegido rookie del año en su temporada de estreno (el segundo europeo en conseguir ese galardón tras Pau Gasol), disputará su tercer All Star en cuatro temporadas tras una sobresaliente reacción personal y colectiva en Dallas. El viaje de reconstrucción del balance inicial de 16 triunfos y 18 derrotas, al actual de 29-23 que sitúa a los Mavericks en el quinto puesto de la Conferencia Oeste (a dos victorias de la cuarta plaza que ocupan los Utah Jazz), con Doncic al frente de la estadística con 26 puntos, 8,8 rebotes y 8,9 asistencias de media en los 37 partidos que ha disputado, con el único borrón estadístico del 31,2% de acierto desde el triple. Se quedó sin premio su exhibición ante Orlando (34 puntos, 12 rebotes y 11 asistencias) y entonó el mea culpa tras la derrota ante Oklahoma la pasada madrugada. “Ha sido mi peor partido en defensa con diferencia y he tomado dos decisiones estúpidas en las dos últimas jugadas. Esto no debería suceder, es culpa mía”, asumió el esloveno, dominando de nuevo la escena.

Una determinación a prueba de derrotas parciales, tras un rearme cimentado desde el aspecto físico. “He tenido un verano largo. Me tomé tres semanas de descanso tras los Juegos y me relajé un poco, puede que demasiado. Sólo tengo que volver al camino correcto”, reconoció Doncic a comienzos de temporada, terciando en el debate sobre su peso. Tras dos años seguidos presentándose a filas por encima de los 115 kilos, el esloveno ha pulido su cuerpo, de 2,02m, y ronda ahora los 108. Una reducción de equipaje para acelerar en busca de los que serían sus terceros playoffs. Jason Kidd, entrenador de los Mavericks, ya se rindió hace 15 días al nuevo Doncic.“Hace el juego simple y divertido, eso es por lo que hay que darle el mérito. Tiene talento para ir a por el dos contra uno, pero se mantiene en cosas sencillas para luego darnos algo más de gas en la parte defensiva”, analizó Kidd antes de acudir a las comparaciones. “Hace lo fácil. Posee esa gracia que tenía Magic o tiene Giannis Antetokounmpo, sabe que no es su mayor fortaleza pero lo da todo en la parte defensiva porque sabe que eso ayuda al equipo a ganar”, sentenció.

Superado el atolladero, Doncic retoma su hoja de ruta. “¿Dónde se ve dentro de cinco años por ejemplo?”, le preguntó EL PAÍS en una entrevista en agosto de 2018, días antes de desembarcar en la NBA. “Ganando el anillo. Ya lo tengo en la cabeza”, respondió el esloveno sin parpadear.

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