Madrid, Barça y Athletic ofrecen a los clubes un plan de financiación más barato que el del fondo CVC
Los tres clubes, que se opusieron al plan de Tebas, presentan un crédito por el mismo importe, 1.994 millones, pero a menos del 3%, entre 4.000 y 12.000 millones menos de coste final
Los presidentes del Real Madrid, Florentino Pérez; del FC Barcelona, Joan Laporta; y del Athletic Club, Aitor Elizegi, enviaron este jueves a los responsables de los otros 39 clubes de LaLiga una carta en la que les presentaban una alternativa de financiación al acuerdo con el fondo de inversión CVC negociado por Javier Tebas, presidente de la patronal. Pérez, Laporta y Elizegi insisten en el escrito, al que ha tenido acceso EL PAÍS, en que los nuevos términos en los que, después del rechazo de sus entidades a participar en él, se ha formulado el denominado Proyecto LaLiga Impulso son “igualmente ruinosos para el fútbol español y, además, [es un acuerdo] no exento de graves irregularidades (tanto en la forma como en el fondo)”. Según aseguran en su escrito, su propuesta, que denominan Proyecto Sostenible y consiste en un préstamo otorgado por JP Morgan, Bank of America y HSBC, proporcionaría a los clubes la misma cantidad de dinero, 1.994 millones de euros en condiciones que sus cálculos encuentran notablemente más ventajosas. La comisión delegada de LaLiga había aprobado este miércoles el Proyecto Impulso, que quedaba a falta únicamente de la ratificación definitiva en la asamblea general programada para el próximo 10 de diciembre, donde aún necesita el voto de 22 de los 42 clubes para entrar en vigor.
La documentación enviada tanto a los otros 39 clubes como al Consejo Superior de Deportes y al propio Javier Tebas incluye un cuadro con la comparación de los números esenciales de ambos proyectos. Mientras el acuerdo con CVC contempla una duración de 50 años, el presentado este jueves propone 25. En ese tiempo, el documento sostiene que el pacto con CVC, en las condiciones de evolución de mercado contenidas en el dossier del Proyecto Impulso, tendría para los clubes un coste de 13.124 millones de euros, mientras que el Proyecto Sostenible contempla un coste para los clubes de 881 millones, una diferencia de 12.243 millones.
La clave de esa gran distancia se encuentra en los costes de financiación de dos operaciones diseñadas de manera distinta. El acuerdo con CVC incluye la formación de una estructura externa conjunta entre LaLiga y el fondo, que controlará los pagos a los clubes, distribuidos a lo largo de cuatro años, y el destino del dinero: 70% a infraestructuras y planes de futuro, 15% a pago de deuda y 15% a contrataciones. A cambio, los clubes comprometen alrededor del 10% de sus derechos audiovisuales durante 50 años, que será el pago al fondo CVC a cambio de esta inversión de 1.994 millones. Según los cálculos incluidos en la carta remitida el jueves a los clubes, eso supone un coste implícito del 9,9%, que, en función de los crecimientos futuros podría llegar, según las cuentas de los tres rebeldes, al 17% (167.758 millones), en un escenario positivo, o quedarse en el 6,4% (3.789 millones) en un escenario de evolución negativo.
Desde que se conoció este proyecto a finales del verano, Florentino Pérez siempre sostuvo que las condiciones actuales del precio del dinero permitían el acceso a financiaciones más baratas, y anunció que trabajaría en una alternativa, la última vez en la asamblea de socios del Real Madrid. La carta remitida este jueves recoge esa idea: “En este preciso momento de la historia, en el que los mercados financieros globales ofrecen oportunidades únicas para financiar proyectos a largo plazo de forma sostenible, tenemos el deber de oponernos a una operación como la planteada por La Liga con CVC que, en el plano económico, lastraría el futuro de nuestro fútbol”.
La financiación que propone el Proyecto Sostenible, elaborado por Key Capital Partners, colaborador habitual del Real Madrid, por ejemplo en el proyecto de la Superliga, supone un coste de entre el 2,5% y el 3%, cuya cifra final depende, según el documento, del rating de la operación, que ahora fijan entre BBB- y BBB+, que según los estándares de SP se corresponde con tener “capacidad adecuada para cumplir con sus obligaciones financieras, pero más sujeto a condiciones económicas adversas”. La propuesta, diseñada con el asesoramiento legal de Clifford Chance, contempla la creación de un vehículo de propósito especial (SPV en sus siglas en inglés), al que los clubes transferirían ″una parte de sus ingresos por los derechos audiovisuales durante los próximos 25 años”. La documentación del proyecto asegura que, a diferencia de lo que entienden que hace el plan de CVC, esto no hipoteca ni cede el control de esos derechos, sino que “los clubes, en su condición de titulares de los derechos audiovisuales, instruirían a LaLiga, como comercializador, para que abone a SPV los primeros 115 millones de euros que generen anualmente sus derechos audiovisuales en LaLiga”. Es decir, una cantidad fija durante 25 años, en lugar de un variable durante 50. El resto del montante anual que generen irá a los clubes según los criterios vigentes.
El acuerdo con CVC diseñado por LaLiga incluía al fondo no solo como entidad que aportaba dinero, sino como socio estratégico capaz de ayudar a desarrollar aspectos del negocio para el futuro, en particular en sus vertientes digitales. CVC tiene experiencia previa en otros deportes, como el motociclismo y la Fórmula 1, pero no ha tenido éxito en sus intentos previos de entrar en el fútbol a través de la liga italiana y la alemana. Pérez, Laporta y Elizegi coinciden en su escrito en la necesidad de potenciar los planes futuros de LaLiga, pero creen que existen alternativas: “Es obvio que La Liga puede -y debe- realizar las contrataciones que resulten necesarias para maximizar su potencial de crecimiento, pero lo debe hacer con sus propios medios, sin renunciar a su independencia, sin perder la plena propiedad de su negocio y sin que los clubes hipotequen su futuro económico”, dice el documento.
La respuesta de Tebas
Una vez recibida la carta este jueves, LaLiga emitió un comunicado en el que asegura que la propuesta “demuestra que la intención es hacer descarrilar un proyecto [Impulso] que pone en peligro sus objetivos individuales, aunque para ello tengan que destruir el futuro colectivo de la competición y sus clubes”, y añade que se trata de una “propuesta improvisada elaborada sin el rigor mínimo exigible”.
El presidente de la patronal, Javier Tebas, escribió este viernes en su cuenta de Twitter que los tres clubes firmantes “buscan confusión y siguen gestionando desde la barra de un bar”.
Resulta que es Anas Laghrari (CEO de Key Capital y del desastre de Superliga) al que manda FP a hacer una propuesta con tal desconocimiento de la situación legal y financiera de los clubes de @LaLiga que es INVIABLE.Buscan confusión y siguen gestionando desde la barra del bar.🤥 pic.twitter.com/PeUuNhMb4d
— Javier Tebas Medrano (@Tebasjavier) December 3, 2021
Puedes seguir a EL PAÍS DEPORTES en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.