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La pasión de Merckx

El libro 'Merckx, mitad hombre, mitad máquina' dibuja el final de una época del ciclista belga

Pedro Zuazua
Portada del libro 'Mitad hombre, mitad máquina', de William Fotheringham.
Portada del libro 'Mitad hombre, mitad máquina', de William Fotheringham.

Hay momentos que definen toda una carrera. Aunque a simple vista parezca que no tienen ninguna importancia. Pueden durar, por ejemplo, dos segundos. Y pueden suceder en el último kilómetro de una etapa del Tour de Francia con meta en Avoriaz. En 1975. Con la cara hinchada y amoratada fruto de una caída que le ha provocado una fractura de mandíbula, un ciclista lanza tres ataques y logra el tercer puesto, arañándole dos segundos al líder de la clasificación general. No parece un gran botín, teniendo en cuenta que su ventaja total se acerca a los tres minutos. Pero en ese ataque intrascendente, que tenía un punto de inmolación, se concentraba la esencia de su protagonista. Los que lo vieron dicen que fue un momento glorioso. Se trataba de Eddy Merckx.

William Fotheringham, periodista británico, exciclista y especialista en la materia, publicó en 2012 un libro sobre el ciclista belga. Siete años después, Merckx, mitad hombre, mitad máquina (Libros de ruta), se publica en español. Aquella etapa con final en Avoiraz dibujaba el final de una época —sería la primera vez en ocho años en la que Merckx terminaba una gran vuelta en una posición que no era la primera— y, sin embargo, sirvió para convertirlo en un icono aún más global. En los seis días que siguieron a aquella etapa —con la confirmación de una doble fractura y sin apenas opciones de victoria— el cinco veces ganador del Tour y del Giro continuó recortando segundos al líder. Peleó hasta el final, engrandeciendo la victoria de Thévenet, que declaró: “Hasta que no quedaron dos vueltas para terminar en los Campos Elíseos, no pude creer que fuera a ganar el Tour”.

Fotheringham ofrece una visión completa y abierta de la carrera de Merckx, y descubre el motor que daba ritmo a aquel pedaleo: la pasión. “Cuando estaba en el colegio me preguntaban que a qué me quería dedicar, y yo respondía 'quiero ser ciclista'. Y entonces me decían: 'pero eso no es un oficio'. No conozco el motivo. En mi familia no había ningún ciclista. Lo cierto es que era eso, pasión. No sé cómo explicarlo”.

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Sobre la firma

Pedro Zuazua
Licenciado en Filología Hispánica por la Universidad de Oviedo, máster en Periodismo por la UAM-EL PAÍS y en Recursos Humanos por el IE. En EL PAÍS, pasó por Deportes, Madrid y EL PAÍS SEMANAL. En la actualidad, es director de comunicación del periódico. Fue consejero del Real Oviedo. Es autor del libro En mi casa no entra un gato.

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