El Valencia coge carrerilla en la Euroliga
Los de Ponsarnau derrotan al Zenit en San Petesburgo (81-86), logran su sexta victoria en los ocho últimos partidos y se meten de lleno en la pelea por el playoff
El Valencia derrotó al Zenit en San Petesburgo (81-86), logró su sexta victoria en los ocho últimos partidos y se metió de lleno en la pelea por el playoff después de una semana pletórica en Rusia. Ganaba el conjunto taronja por 14 de ventaja a nueve minutos del final del partido (53-67), pero los de Ponsarnau concedieron un parcial de 21-7 en un santiamén y se condenaron a vivir un desenlace más apretado del que merecían. No tuvieron inconveniente en remangarse de nuevo para sellar su décimo triunfo en 20 jornadas de Euroliga. Con descanso para Colom y las bajas de pesos pesados como Dubljevic y Tobey, Ndour (11 puntos, ocho faltas recibidas y 23 de valoración), Van Rossom (9 puntos y 8 asistencias), Marinkovic, Motum y Doornekamp dieron un paso al frente para consolidar el optimismo de los naranjas.
Llegaba el Valencia a San Petesburgo con la estela optimista de su triunfo ante el Khimki (cancha en la que perdió el Madrid dos días después) que permitió a los de Ponsarnau retomar una secuencia de cinco victorias en las siete jornadas precedentes. Ya son seis en las ocho últimas. A pesar de las importantes bajas de Dubljevic y Tobey en la gira rusa, el conjunto taronja mostró de nuevo un perfil solvente ante el Zenit. Con un 4-14 de parcial entre el minuto 7 y el 12, se hizo con el mando del partido. Del 16-11 al 20-25.
Inferior en el rebote, el Valencia afinó los porcentajes de tiro (7 de 11 en el primer cuarto) y se agarró a la efervescencia de Ndour para contener a Zubkov y Ayón. Renfroe y Albicy titubearon en el manejo de las operaciones mientras, Motum , Marinkovic y Loyd se sumaban a la causa valencianista. Los de Ponsarnau se movían con un plan y el Zenit lo hacía a impulsos individuales. El marcador comenzó una sístole y diástole sin pausa, siempre con los visitantes al mando gracias a su volumen anotador (5 de 7 en triples al descanso).
Solo la ráfaga anotadora de Albicy (14 puntos en el segundo cuarto, con un 4 de 5 en triples) y la brega de Colton Iverson impidieron que cuajara el demarraje valencianista en la primera mitad (42-46, m. 20). Contuvo el Zenit la producción anotadora de su rival en la reanudación, pero también se fue achatando la propia.
El Valencia hizo de la necesidad virtud y, en ausencia de sus torres, aceleró con un juego dinámico, abierto y fluido para descoser el marcador antes de entrar en la recta de meta. Motum colocó la máxima con dos más uno casi sobre la bocina del final del tercer cuarto (51-63, m. 30). El Zenit fue incapaz de poner en valor su abrumador dominio en el rebote ofensivo y el planteamiento coral de Ponsarnau fue devorando el partido.
Dos triples de videoteca, de Marinkovic y Van Rossom, continuaron minando la moral del Zenit. Apenas Albicy mantuvo el tipo durante el chaparrón valencianista. Echaron de menos los de Plaza la aportación del exvalencianista Will Thomas, clave en la victoria del cuadro ruso ante el Baskonia dos días antes. Sin embargo, la rebeldía de Albicy encontró la complicidad de Zubkov y, entre ambos, armaron un inopinado parcial de 21-7 en cuatro minutos: del 53-67 al 74-74. Ahí despertó el Valencia para ganar por segunda vez un partido que ya tenía ganado. El triunfo que le mete de lleno en la pelea por el playoff.
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