Marc Márquez se opera el húmero por tercera vez

Marc Márquez, seis veces campeón del mundo de MotoGP, ha sido operado del húmero por tercera vez este jueves en el Hospital Ruber Internacional, en Madrid. La intervención se estimó imprescindible para ayudar a la recuperación del brazo que se lesionó a consecuencia de un accidente en la primera carrera de la temporada, en el circuito de Jerez el 16 de julio. Dicha recuperación se complicó a las pocas semanas al producirse una segunda fractura por estrés que obligó a una segunda operación. La lenta evolución experimentada por el deportista acabó revelando una pseudoartrosis, causa por la que un tercer paso por quirófano resultó finalmente ineludible.

Márquez, de 28 años, que no pudo volver a competir desde aquella caída en el gran premio de España y que ha sido el gran ausente del Mundial de Motociclismo de este 2020 que ha conquistado Joan Mir, ve así comprometido también el inicio del curso 2021. Varios expertos médicos han estimado que el corredor necesitará de unos seis meses de baja, plazos que sitúan su regreso a las pistas, al menos, en el mes de mayo, cuando previsiblemente —el calendario todavía es provisional y está sujeto a la evolución de la pandemia— se hayan disputado ya las tres primeras carreras de la nueva temporada.

La operación, que se prolongó durante ocho horas y transcurrió sin incidencias, consistió en la retirada de la placa previa y la colocación de una nueva placa con aporte de injerto de cresta ilíaca, asociado a un colgajo libre cortico-perióstico. Así informaba el postrero comunicado del equipo Honda.

La segunda fractura, en el mes de agosto, había afectado de manera importante a la recuperación del brazo hasta tal punto que los doctores —los de Dexeus y aquellos a los que el piloto ha consultado en todos estos meses, en Austria y en Estados Unidos— se plantearon intervenir de nuevo.

“La recuperación está yendo más lenta de lo normal, porque desde un inicio no se hicieron las cosas bien”, llegó a declarar Emilio Alzamora, representante del corredor, al diario As. Se refería el ex piloto a la decisión de volver a las pistas con premura aquel mes de julio. Márquez quiso intentarlo, pero lo hizo con el visto bueno de los médicos —del que le operó en el Hospital Quirón Dexeus, en Barcelona, el doctor Xavier Mir, y de los que le hicieron una serie de pruebas físicas ya en el circuito de Jerez—, también con la aprobación de su equipo. Si bien, y aunque nadie lo previó, todo aquel sobreesfuerzo acabó afectándole.

Hasta que con el paso de los días, y tal y como anunció EL PAÍS hace una semana, los doctores y el deportista se pusieron una fecha límite, el 1 de diciembre, para tomar una decisión sobre si operar o seguir con un tratamiento conservador que no estaba dando buenos resultados.

En esa última revisión que pasó el deportista en el Hospital Quirón Dexeus de Barcelona, a principios de esta semana, ese mismo equipo aconsejó a Márquez que se realizara una nueva intervención quirúrgica para ayudar a que el hueso pueda soldar correctamente. Apenas unos días más tarde, el piloto viajó a Madrid para ser operado finalmente ayer —han pasado casi cinco meses desde que se rompió por vez primera— por los traumatólogos del Hospital Ruber, en quienes depositó su confianza y donde La Sexta lo cazó y arrancó unas palabras al padre del corredor, Julià Márquez. “Está bien, gracias”, concedía.