Inter y Chelsea se suben al tren europeo
Liverpool y Nápoles resuelven con victorias sus visitas a los bisoños Genk y Salzburgo
El Inter quiere volver a ser grande. Lo intenta con el sello de Antonio Conte, los tres centrales, la presión, el sudor y la fortaleza en las acciones de estrategia. En la Serie A aguanta el tirón y transita a un punto de la Juventus, tras ganar todos los partidos y apenas caer en el choque directo con el campeón turinés y ahora se apunta a Europa tras entrar con mal pie. El empate, postrero, en la jornada inicial ante el Slavia y la derrota en Barcelona le dejaron con el agua al cuello ante la visita del Borussia Dortmund. En un partido cerrado, sin apenas opciones de gol, se hizo fuerte (2-0) con un tanto de Lautaro Martínez al filo del fuera de juego. El punta argentino falló un penalti a diez minutos del final forzado por Esposito, un chico nacido en 2002. Pero la zaga interista fue indescifrable para el Borussia, que se queda tercero en el grupo e igualado a puntos con su rival, al que recibirá la próxima jornada en un duelo aún más decisivo. Y el segundo gol final de Candreva le da más opciones en caso de igualada final en la tabla,
Resultados y clasificaciones
Grupo E: RB Salzburgo-Nápoles (2-3); Genk-Liverpool (1-4)
1. Nápoles, 7 puntos; 2. Liverpool, 6 puntos; 3. Salzburgo, 3 puntos; 4. Genk, 1 punto
Grupo F: Inter-B. Dortmund (2-0); Slavia Praga-Barcelona (1-2)
1. Barcelona, 7 puntos; 2. Inter, 4 puntos; 3. B. Dortmund, 3 puntos; 4. Slavia Praga, 1 punto
Grupo G: RB Leipzig-Zenit (2-1); Lyon-Benfica (2-1)
1. RB Leipzig, 6 puntos; 2. Zenit, 4 puntos; 3. Lyon, 4 puntos; 4. Benfica, 3 puntos
Grupo H: Ajax-Chelsea (0-1); Lille-Valencia (1-1)
1. Ajax, 6 puntos; 2. Chelsea, 6 puntos; 3. Valencia, 4 puntos; 4. Lille, 1 punto
El anterior equipo de Conte también se afirmó para defender sus opciones en un grupo reñido que todavía encabeza el Ajax. Pero los holandeses cayeron (0-1) ante el Chelsea en Amsterdam. No debieron hacerlo. Tuvieron el partido controlado, el videoarbitraje y sus líneas le anularon un gol antes del descanso porque media bota de Promes estaba en posición ilegal. Luego el mexicano Edson Álvarez remató al larguero. Los ingleses, con los jóvenes Mount, Abraham y Hudson-Odoi al ataque, tomaron malas decisiones en el área. Al final les arregló el partido Batshuayi, que evidenció que los cambios que decidió Lampard mejoraron a un equipo que ha remontado con dos triunfos a domicilio su tropiezo inicial contra el Valencia.
Los novatos se muestran y la Liga de Campeones sirve también de escaparate de dos interesantes viveros. Genk y Salzburgo se presentaron a jugar ante Liverpool y Nápoles con más de medio equipo conformado por futbolistas que no superaban los 22 años de edad. En el caso del equipo belga el jugador más veterano, el tanzano Samatta, tiene 26. Entre tanto imberbe descolló Erling Haaland, noruego nacido en Inglaterra y con apellido con pasado futbolístico, el de su padre, zaguero que tuvo que dejar el fútbol tras una brutal entrada de Roy Keane en una de los episodios más negros de la Premier League en un derbi de Manchester.
El jovencito Haaland es delantero, frisa los dos metros de altura y nació en el año 2000. Es una fuerza de la naturaleza menos tosca de lo que aparenta. Al Nápoles le hizo pasar un mal rato, salvado el equipo italiano durante bastantes minutos por la actuación de su meta Alex Meret. Haland igualó de penalti, al filo del descanso, el gol de Mertens que había adelantado a los italianos. Luego volvieron a marcar los dos de nuevo. Haaland ha marcado seis goles en los tres partidos del estreno del cuadro austriaco en la Champions y lleva 21 en 14 partidos esta temporada. Pero el Salzburgo, bisoño, cayó al final (2-3) víctimas de un gol de Lorenzo Insigne.
El Genk puso en apuros al vigente campeón durante bastantes minutos, pero fue por detrás en el marcador casi desde el pitido inicial. Oxlade-Chamberlain marcó de inicio y cerró el partido una hora después. Luego redondearon Sadio Mané y Salah una excesiva goleada (1-4). Entre medias mereció más el plurinacional combinado que se enfrentó al Liverpool, gol anulado incluído a Samatta cuando el marcador lucía ventaja mínima para los reds.
La jornada se completó en el grupo más parejo y también el único que no alberga a un favorito al título. Los triunfos de Leipzig ante Zenit (2-1) y el agónico de Benfica contra Lyon (2-1), tras regalo final del meta Anthony Lopez para los lisboetas, dejan todo en un pañuelo.
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