La fe del Huesca deja a medias al Villarreal

El Villarreal no supo asegurar virtualmente la salvación. Lo evitó el Huesca, al que se le está quedando corta la Liga y cuyo descenso parece inevitable. A pesar de su déficit de puntos, la fe del conjunto aragonés es encomiable. En La Cerámica, el equipo de Francisco se propuso desde el pitido inicial y hasta el final ir a por la victoria. Y se quedó a un palmo, complicando la existencia de un Villarreal que no aguantó el empuje oscense y su ambición.

El empate final se quedó corto para ambos equipos. A los de Calleja les entró vértigo. Una victoria ante el Huesca hubiese supuesto poner definitivamente un final feliz al drama de una temporada para olvidar. Se tuvo que conformar con un punto, superado en gran parte del partido por un Huesca orgulloso.

Tardó en arrancar el Villarreal. Lo que le costó a Cazorla coger el tacto con el esférico, repartir pases y activar a sus compañeros. Al Huesca le tocó recular ante la iniciativa local y las arrancadas de Chukwueze, excesivamente individualista en ocasiones, otra vez un martirio para los defensas contrarios. En una aceleración del nigeriano llegó el gol del Villarreal. Chukwueze se internó en el área y su pase horizontal fue a parar a Pablo Fornals, que envió el balón a la red con una extraña rabona.

El Huesca no se venció con la desventaja. Yangel Herrera y Enric Gallego asustaron a Andrés Fernández y los de Calleja agradecieron la llegada del descanso.

La segunda mitad se convirtió en un correcalles, con el Huesca lanzado a por el empate y el Villarreal intentando matar el partido. A falta de un cuarto de hora el conjunto aragonés logró el bingo con un gol de Chimy Ávila. El Huesca quería más. Y Chucho Hernández tuvo la remontada en sus pies. El empate dejó sin el premio mayor al Villarreal y a un Huesca que no baja los brazos.