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“Kroos no se adaptó porque lo presionaron”

Lopetegui pone al alemán en lugar de Casemiro y rectifica en el descanso ante el hostigamiento de Raúl García y Williams

Diego Torres
Kroos, ante Williams.
Kroos, ante Williams.LLUIS GENE (AFP)

Toni Kroos no dejaba de secarse el sudor de la nariz con la mano, como intentando taponar un grifo roto. El organismo del alemán somatizaba su incomodidad en el campo de juego con un chorreo de transpiración. Parecía asfixiado. Cuando el Madrid iniciaba el juego, Raúl García y Williams lo sometían a una persecución implacable; cuando perdía la pelota se le veía incapaz de cerrar los espacios que se abrían a su espalda con la energía debida. Raúl García se le colaba una y otra vez, listo para recibir y pasar. El sufrimiento de Kroos estaba anunciado. Ya lo intentaron Guardiola, Ancelotti, Benítez y Zidane, sin resultados. En San Mamés lo probó Julen Lopetegui, una vez más, y el experimento duró 45 minutos. Tampoco esta vez Kroos pudo gobernar al equipo en todas las facetas desde el mediocentro.

Quitar a Casemiro, el mejor especialista de la plantilla, para poner a Kroos en el carril más delicado, fue la decisión más extraña de Lopetegui en Bilbao. Le salió tan mal que en el descanso modificó toda la línea de volantes. Pero se explicó. “Toni”, dijo el técnico, “ha jugado muchas veces en esa posición, tanto en el Madrid como en su selección. Él se adapta perfectamente a las posiciones de seis y de ocho, dependiendo del partido que sea y las circunstancias que sean. Si aquí no se ha adaptado, eso hay que atribuirlo más a la presión que ha hecho el Athletic, que ha sido muy buena y no lo ha dejado maniobrar él como habría querido”.

Lopetegui inició el partido con una línea de medios formada por Modric, Kroos y Ceballos y en el minuto 60 ya había cambiado a una segunda versión compuesta por Isco, Casemiro y Kroos. Pareció una rectificación sobre la marcha. Una improvisación muy difícil de ejecutar con el partido lanzado. El entrenador del Athletic analizó la medida con curiosidad. “Creo que la presencia de Kroos obedeció a intentar jugar desde posiciones retrasadas alimentando a su equipo desde su buen pie”, dijo Eduardo Berizzo. “Pero nuestra presión con Raúl y Williams evitó eso. Tal vez Lopetegui interpretó como solución a esa presión que Casemiro no participe en la salida y se desprenda, como hizo en la segunda parte. La entrada de Rico ajustó un poco eso. Pero en el Madrid, si no se escapa Casemiro se escapa Ramos, o Varane. La calidad individual de la zaga y el mediocentro del Madrid hace que te desajustes. Si llegas tarde a la presión desde ahí inician todo el peligro. Parece una contradicción pero debo decir que los mejores atacantes del Madrid resultaron ser sus dos centrales. En las mejores acciones del Madrid todo empezó con el desprendimiento de sus dos centrales y de Casemiro. Creo que Lopetegui interpretó en la segunda parte que lo mejor era verticalizar con Casemiro y no iniciar con Kroos desde tan atrás”.

Lopetegui dijo que su equipo no interpretó bien el desafío táctico del Athletic en el arranque del partido. “Los marcajes al hombre [singularidad de Berizzo] nos cambian algunas cuestiones tácticas. La primera parte no lo hemos terminado de entender bien, la segunda creo que sí. Hicimos ocasiones para poder ganar pero no tuvimos ese acierto en situaciones finales”.

Marcelo se rebrincó cuando en la zona mixta le preguntaron si no habían echado en falta a Cristiano. “La gente también se acuerda de Zidane, de Raúl, de Iker...”, replicó el brasileño, indignado ante tanta nostalgia.

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Sobre la firma

Diego Torres
Es licenciado en Derecho, máster en Periodismo por la UAM, especializado en información de Deportes desde que comenzó a trabajar para El País en el verano de 1997. Ha cubierto cinco Juegos Olímpicos, cinco Mundiales de Fútbol y seis Eurocopas.

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