Los Warriors y los Sixers intimidan a los Spurs y a los Heat en el arranque de los ‘playoffs’

“Parecíamos un ciervo deslumbrado por los faros de un automóvil”, resumió con su habitual sarcasmo Gregg Popovich tras la derrota de San Antonio (113-92) en la cancha de Golden State. Los defensores del título habían sembrado muchas dudas durante la temporada regular. Acabaron segundos, lejos de Houston, y jugaron especialmente mal en el último tramo, con tres derrotas en los últimos cuatro partidos, la última por 40 puntos (119-79) ante Utah.

Pero ya durante el primer cuarto de su duelo ante los Spurs (28-17) dejaron claro su radical cambio de registro coincidiendo con el inicio de los ‘playoffs’. Iguodala, que solo había sido titular siete veces esta temporada, tomó el timón en el puesto que dejó vacante Stephen Curry, lesionado en una rodilla desde el 23 de marzo. Kevin Durant, con 24 puntos, ocho rebotes y siete asistencias; Klay Thompson, con 27 puntos; Draymond Green, con 12 puntos, ocho rebotes y 11 asistencias, propulsaron a su equipo. McGee también estuvo notable, con 15 puntos y cuatro rebotes en solo 16 minutos, y los Warriors dominaban por 18 puntos poco antes del descanso.

Los Spurs quedaron fuera de onda, especialmente superados en el rebote, con 21 capturas menos, un déficit determinante. Llegaron a acumular una desventaja de 28 puntos en el inicio del último cuarto (75-103). Aldridge se quedó en 14 puntos y solo dos rebotes. Pau Gasol salió desde el banquillo y también se quedó en dos rebotes, además de seis puntos y cuatro asistencias. Uno de los pocos que se salvó de la mediocridad fue Rudy Gay, con 15 puntos, seis rebotes, dos asistencias y dos robos de balón.

Exhibición de los Sixers en su primer partido de la serie ante Miami (130-103). La afición de Filadelfia celebró por todo lo alto el regreso de su equipo a los ‘playoffs’. No jugaba la fase final desde 2012 cuando en el equipo estaban jugadores como Iguodala, Jrue Holiday, Thaddeus Young, Elton Brand y Lou Williams. Desde entonces, la travesía del desierto. Con una temporada especialmente funesta, la 2015-2016, en la que solo obtuvieron 10 victorias y perdieron 72 partidos.

La victoria de los Sixers tuvo varios protagonistas, con sobresalientes actuaciones. Ben Simmons rozó el triple doble: 17 puntos, nueve rebotes y 14 asistencias. Redick sumó cuatro triples y 28 puntos; Belinelli, cuatro triples más y 25 puntos; Ilyasova, 17 puntos y 14 rebotes; y Saric, cuatro triples más y 20 puntos. En total, 18 triples, récord de la franquicia en un ‘playoff’.

Fue una exhibición de juego y efectividad de un equipo que lleva 17 victorias consecutivas y al que pronto se incorporará uno de sus líderes, Joel Embiid, lesionado. Miami, con 26 puntos de Olynyk, 15 de Dragic y 13 de James Johnson dominó incluso en el primer tiempo, pero a partir del tercer cuarto, el tirón de los Sixers fue irresistible.

Los Spurs echaron de menos a Kawhi Leonard, su estrella, que continúa siendo baja. Se lesionó en el primer partido de la final del Oeste de la pasada temporada, en la que los Warriors barrieron por 4-0 a los Spurs, y desde entonces solo jugo de manera intermitente nueve partidos entre diciembre y enero.

Serge Ibaka fue uno de los grandes protagonistas del triunfo de Toronto ante Washington (114-106). El jugador congoleño con pasaporte español sumó 23 puntos, 12 rebotes y dos tapones.

Fue la primera victoria de los Raptors en un primer partido de los ‘playoffs’ desde la que obtuvieron en 2001 ante los Sixers. Toronto había perdido sus diez últimos primeros partidos en los ‘playoffs’.

Los triples de los Raptors (16 de 39) hicieron mucho daño a la defensa de los Wizards. Delon Wright, con 18 puntos, 11 de ellos en el último cuarto, DeRozan, con 17, y Lowry, con 11 puntos y nueve asistencias, se repartieron la labor ofensiva del equipo canadiense.

La réplica de John Wall, con 23 puntos y 15 asistencias, Markieff Morris, con 22 puntos y 11 rebotes, y Beal, con 19 puntos, resultó insuficiente.

Un tapón de Holiday a Connaughton a falta de seis segundos para el final y dos tiros libres convertidos por Anthony Davis hicieron ya intrascendente la última canasta de McCollum y sentenciaron el triunfo de Nueva Orleans en Portland (95-97). Los Blazers, que llegaron a acumular una desventaja de 19 puntos, no pudieron completar la remontada.

Anthony Davis, con 35 puntos, 14 rebotes y cuatro tapones, lideró a los Pelicans. Rondo impuso el ritmo de juego con 17 asistencias, ocho rebotes y seis puntos. Nikola Mirotic fue otra de las piezas relevantes de su equipo con una actuación muy completa: 16 puntos, 11 rebotes, tres asistencias, dos robos de balón y cuatro tapones. Y Holiday, además de su importante tapón, aportó 21 puntos y siete rebotes.

Los Trail Blazers se quedaron cortos con los 19 puntos de McCollum, los 18 puntos, siete rebotes y siete asistencias de Lillard y los 11 puntos y otras tantas asistencias de Nurkic.