El Real Madrid supera a Las Palmas con un doblete de Bale

Con la mitad de las grandes figuras guardadas para la Champions, Garteh Bale asomó la cabeza en Las Palmas y fue suficiente para que los de Zinedine Zidane resolviesen con holgura un nuevo compromiso liguero. Con el galés en modo estrella, partiendo desde su posición natural, la banda izquierda, el equipo de Jémez solo presentó batalla hasta que el 11 pegó el primer zarpazo. Modric, uno de los pocos titulares que reclutó el técnico para viajar a las islas, frotó su inagotable varita y encontró el hueco para habilitar a Bale ante Chichizola. No falló el galés.

El latigazo del atacante fundió a Las Palmas, valiente hasta entonces, buscando incluso adelantarse en varias acciones de Halilovic, Momo o Calleri. Falló y falló y eso es demasiado perdonar cuando enfrente está el Real Madrid, que poco tardó en sentenciar el partido y poner del todo la mente en Turín. Fuera de su área, Calleri pecó de novato y derribó a Lucas. Se atrevió Benzema y acertó con un certero lanzamiento. Después de un par de semanas liberado, la pena máxima pareció otorgar un extra de confianza al francés en su partido número 400 con el Real Madrid. Fue un espejismo, pues se hinchó a fallar después.

Todo lo contrario que Bale, que parece haber recuperado la sonrisa tras su paso por China con Gales. Activo, buscando participar y moviéndose por libertad en todo el ataque, forzó otra pena máxima en la segunda mitad y la ejecutó con éxito. Su doblete tumbó a Las Palmas, que había salido dispuesta a guerrear. Con todo decidido, Zidane guardó a Casemiro y Modric a falta de media hora y el atacante británico siguió a lo suyo, buscando el triplete y asistiendo a uno y a otro. No firmó lo primero y nadie aprovechó lo segundo. Agarrados a un Bale estelar que se reivindicó ante Zidane, el Madrid sonrió en Las Palmas a tres días de volver a jugarse el curso en Europa, esta vez en Turín y ante la Juve.