Los jugadores del Eibar celebran uno de los goles.Juan Herrero (EFE)
A pesar de arrancar la temporada al traspié, el Eibar ha ido enderezándose poco a poco y comienza a ser un equipo mucho más reconocible. Este domingo, el cuadro armero superó al Espanyol (3-1) en Ipurua y se situó a solo cuatro puntos de los puestos que dan acceso a las competiciones europeas.
Kike García, Alejo y Jordán, este último de penalti, fueron los autores de los goles locales, mientras que el visitante corrió a cargo de Sergi Enrich, que marcó en propia puerta al intentar despejar el balón. Los gipuzcoanos, de esta forma, consolidan su mejora: de los últimos nueve puntos han sumado el pleno.
