El Manchester City sigue adelante con su transformación

El Manchester City se encuentra en uno de esos momentos en los que su reconversión en mariposa parece más cerca, a la espera de que se complete (o no) dentro del ciclo natural de las competiciones, para lo que quedan todavía algunos meses por delante. Por el momento camina con paso firme en una Premier League en la que es líder, y también en Europa, donde ayer derrotó al Nápoles (2-1), y sumó su tercera victoria consecutiva gracias a un nuevo ejercicio de juego que empieza a convertirse en un patrón.

Con dos goles en los primeros trece minutos finiquitó un encuentro que manejó con gusto por la posesión, el movimiento continuo de dos ejes —el centro del campo y el ataque—, y el traslado delicado de la pelota, sin olvidar la presión en la recuperación de balón, seña de identidad de cualquier equipo dominante. Enfrente, el Nápoles, líder de la Seria A italiana, trató de recomponerse a partir de un juego igualmente solidario, similar en su arquitectura táctica, pero inferior en el emparejamiento individual.

Ni Hamsik, un mariscal sobre el campo, pudo estresar a De Bruyne o Silva, y mucho menos auxiliar a Hysaj o Ghoulam en las bandas, atormentados ambos por Sané y Sterling. El extremo inglés marcó el primer tanto para los citizen tras una buena llegada de Silva, mientras que Gabriel Jesus amplió la ventaja tras embocar un gran centro raso de De Bruyne. Pudo meterse en el partido el Nápoles si Mertens hubiera convertido un penalti de Walker sobre Albiol, pero Ederson acertó la trayectoria del remate del belga. No pudo evitar el portero brasileño el tanto desde los once metros, tras una nueva pena máxima, de Diawara, que comprometió en el último cuarto de hora del partido a un City que, sin embargo, no falló.

Festín ‘red’

El Liverpool se quedó a gusto en su enfrentamiento ante el Maribor en Eslovenia, donde logró la goleada más amplia hasta el momento en esta edición de la Liga de Campeones (0-7). Dos goles de Firmino, otros tantos de Salah, Coutinho, Oxlade-Chamberlain y Alexander-Arnold sellaron una victoria que sitúa a los reds en la segunda plaza del grupo E, por delante del Sevilla y detrás del Spartak de Moscú.

En el resto de encuentros de la jornada destacó la victoria del Leipzig alemán sobre un Oporto en el que Iker Casillas ocupó el banquillo (3-2). El técnico de los portugueses, Sergio Conceição, apostó por el joven José Sá en la portería, al que ya entregó la titularidad en el último encuentro de la Copa ante el Lusitano de Évora. Hasta ayer Casillas no se había perdido ni un solo encuentro de Champions o Liga Europa, entre los que acumulaba 20 encuentros.

Quienes sí lograron la victoria a domicilio fueron el Shakhtar Donetsk ante el Feyenoord en Holanda (1-2) y el Besiktas frente al Mónaco (1-2). El Borussia Dortmund no pudo pasar del empate ante el APOEL (1-1), lo que mantiene al conjunto de Peter Bosz en el penúltimo puesto del grupo H, por delante de los chipriotas, y muy lejos de Real Madrid y Tottenham.