Morata deslumbra en el Chelsea con un triplete

Este viernes al mismo tiempo que Diego Costa aterrizaba en Barajas, su técnico en el Chelsea, Antonio Conte, aseguraba en Londres que confiaba tanto en su sustituto que le confiaría lo más valioso: “Morata es el tipo de hombre con el que dejarías que una hija se casara”. Llega tarde Conte porque su delantero contrajo matrimonio el pasado verano, pero como desagravio le ofrecen goles. En la visita a Stoke, uno de esos escenarios donde mora la esencia del fútbol de las islas y todo es incómodo para el visitante, Morata se exhibió con tres goles de todos los colores para sellar una cómoda victoria del Chelsea (0-4) y mantenerlo en la estela de los dos equipos de Manchester. United y City superaron respectivamente a Southampton (0-1) y Crystal Palace (5-0) y lideran la Premier League con tres puntos de ventaja sobre el cuadro londinense, que el viernes visita el Wanda Metropolitano en partido de Liga de Campeones y el sábado recibe al equipo que prepara Pep Guardiola.

En todo ese trajín Morata se ha abierto paso para acallar las voces que anunciaban un costoso peaje en su aterrizaje en la competición inglesa. Lleva seis goles en seis jornadas, se ha instalado como máximo goleador del campeonato junto a Agüero y Lukaku y ha igualado incluso la aportación de Diego Costa en su centelleante aparición en la Premier League justo después del pasado Mundial. Entonces, hace tres años, el delantero hispano-brasileño estuvo involucrado en ocho goles durante los seis primeros partidos que jugó con el Chelsea. Morata le ha igualado con seis dianas y dos asistencias. “No me interesa hablar del pasado”, apunta Conte cuando le preguntan por Costa. Prefiere centrarse en Morata, al que ya había fichado para la Juventus y al que se quedó con las ganas de entrenar porque por medio se cruzó una oferta para trabajar en la selección italiana: “Hemos hecho una buena operación porque se trata de un futbolista de 24 años con el que existe la posibilidad de trabajar durante los próximo diez años. Tiene margen de mejora en lo táctico, en lo físico y en lo técnico porque además está muy comprometido y su comportamiento es fantástico”.

Así, la inclinación a la pendencia de Costa deja paso en el Chelsea a Morata al goleador amable, el yerno ideal que destila a través de las redes sociales una almibarada vida de recién casado junto a su pareja, dichosos con su nueva vida a orillas del Támesis, no muy lejos de Stamford Bridge. Tan diferentes y tan efectivos en su profesión. Dos maneras de entender la vida de delantero al servicio de Julen Lopetegui y la selección española. Los tres goles de Stoke retratan a Morata como un delantero dúctil y de amplio repertorio. En el primero realizó un desmarque lateral para encontrar el espacio en un pase de Azpilicueta y definir ante el portero; en el segundo mostró su potencia al recuperar la pelota en medio campo y cabalgar hasta la boca de gol para resolver con sutileza. El tercero llevó la firma de un nueve tras nueva asistencia de Azpilicueta, la cuarta que da el zaguero navarro en lo que va de campeonato. Pedro había marcado el segundo tanto del Chelsea a la media hora, momento en el que el partido quedó sentenciado.

Morata deslumbra en la Premier y hasta puede trazarse una comparación, siempre con el riesgo de que resulte odiosa: ha marcado en partidos de liga tantos goles en los seis últimos partidos como Karim Benzema con el Real Madrid en los últimos veinte. La influencia de Diego Costa en en el equipo campeón que tejió Antonio Conte se resume en una aportación de 20 goles en 26 partidos. No admite discusión. Pero el técnico italiano no tenía dudas sobre la necesidad de cambiar, una decisión de riesgo que por el momento le deja en buen lugar. “Este es el momento de Morata, el de ser titular en un gran equipo europeo”, entiende.