“Machín se fija en el rendimiento, no mira el DNI”

Àlex Granell (Olot, Girona; 29 años) es un mediocentro versátil; aguerrido en defensa, potente en ataque. Vive su primera experiencia en la élite después de ser un trotamundos del fútbol catalán con billete de vuelta a Montilivi. Descartado a los 16 años por el Girona, volvió en 2014 cuando el equipo estaba en Segunda. Entre ambas etapas, Granell se curtió en nueve equipos repartidos entre Segunda y Primera Catalana, Tercera División y Segunda B. Su particular escalada termina con el brazalete de capitán en el estreno del equipo de Pablo Machín en Primera. Ejecutor indiscutible de las jugadas a balón parado, de su zurda han nacido los tres goles del Girona en la Liga.

Pregunta. ¿Qué piensa antes de golpear las faltas?

Respuesta. En la zona donde debo dar el pase. No es fácil precisar el golpeo, pero es importante que haya trabajo previo, como un bloqueo o que algún futbolista se desmarque a la zona que tenemos pactada.

P. ¿Piensa en el penalti fallado ante el Sevilla?

R. He lanzado muchos penaltis, me quedó con la conciencia tranquila de haber tomado la responsabilidad. Sé que no me pudo la presión. Hay jugadores que regatean, otros que marcan goles; mi especialidad es el balón parado, pero tengo otras cualidades que son las que me hacen ser titular en el equipo.

P. El balón parado es una de las señas de identidad del equipo, ¿cuáles son las otras?

El Barcelona va a estar incómodo. En Montilivi los rivales sufren

R. Es un equipo exageradamente ambicioso y nunca especula. Como nos falta el talento, todos somos muy solidarios y agresivos en la presión, desde el delantero hasta los centrales.

P. Machín sigue confiando en los titulares que consiguieron el ascenso. ¿Es importante mantener el grueso del equipo?

R. Es muy importante que haya un bloque que conozca el club y la ciudad. Los nuevos se están adaptando, pero es clave que en un grupo de 25 futbolistas, 12 se mantengan del equipo anterior.

P. Muchos de estos jugadores no teníais experiencia en Primera. ¿La ilusión puede con todo?

Espero que el acuerdo con el City no nos haga perder nuestra identidad

R. Sin duda. Donde no llega la experiencia, llega la ambición y la ilusión. Eso nos ha permitido luchar de tú a tú contra nuestros rivales.

P. ¿Ni el Barça les asusta?

R. Para un club como el Girona, recién ascendido, que venga a nuestro campo un club como el Barça es una ilusión muy grande. No da miedo ni angustia, todo lo contrario; tenemos la ambición y el deseo de poder disfrutar de un partido muy especial para la historia de nuestro club. Queremos que Montilivi sea una verdadera fiesta y que se viva un día único.

P. ¿El ambiente puede jugarles en contra?

R. No, pero es verdad que si hay un equipo al que es difícil meterle mano, ese es el Barça. Van a estar incómodos. En Montilivi los rivales sufren. Somos un equipo intenso y no renunciamos a elaborar un buen juego. Con nuestra gente nos vamos a venir arriba.

P. Acaba contrato en 2018. ¿Si el Girona se mantiene, seguirá?

R. A día de hoy lo desconozco porque el club no me ha enviado ninguna propuesta. He nacido aquí, llevo tres años en el club y soy uno de los capitanes, así que el Girona pasa por delante de muchos equipos. Ahora mismo estoy centrado en jugar y no me preocupa.

P. ¿Qué se le pasó por la cabeza cuando lo descartaron en cadete?

R. No jugar más al fútbol. No entendía este deporte sin el Girona. Jugué desde los cinco a los dieciséis aquí. Después la familia te hace ver las cosas y se puede disfrutar del fútbol. Han sido muchas categorías sin imaginarme ser futbolista profesional. Fue un camino mucho más largo que, por suerte, me ha permitido estudiar y tener dos carreras universitarias.

P. ¿La Primera División le llega tarde?

R. A nivel de experiencia, es mi mejor momento. Es verdad que si me hubiera llegado a los 26 años aprovecharía más el tiempo, pero física, futbolística y emocionalmente estoy preparado para enfrentarme a los mejores futbolistas.

P. ¿Cómo ven los jugadores de la casa el acuerdo con el Manchester City?

R. Lo veo como un aficionado y le doy importancia porque nos va a ayudar a seguir creciendo y ser estables. Lo que más deseo es que no se pierda identidad como club y que los jóvenes vean a referentes de la casa. Vendrán citas ambiciosas en unos años y nos ayudarán porque son poderosos, pero nunca tenemos que perder de vista quiénes somos.

P. ¿Con qué equipo de Primera se identifican?

R. A nivel de juego, con el Atlético de Madrid por ser un equipo comprometido en tareas defensivas. Como club nos tenemos que fijar en el Eibar, que se ha mantenido sin apuros, sabiendo que el Girona tiene a un gigante detrás que le va a ayudar a ser más grande.

P. A Pablo Machín también le gusta fijarse en el Atlético. ¿Cómo de importante fue él en su llegada y posterior asentamiento en el equipo?

R. Es la persona que confió en mí cuando había jugadores de más nombre. Solo se fija el rendimiento, no mira el DNI.