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El Barça se atasca en Tarragona

El equipo de Valverde empata ante el Nàstic gracias a un tanto de Alcácer y Vermaelen vuelve a lesionarse

Marc Rovira
Samper controla el balón, rodeado de jugadores del Nàstic.
Samper controla el balón, rodeado de jugadores del Nàstic. JOSE JORDAN (AFP)

El calor húmedo de Tarragona le trabó las piernas y le espesó la cabeza a los jugadores del Barça, en la que era la primera puesta en escena del equipo de Valverde tras la gira americana. Solo un zambombazo de Alcácer evitó la primera derrota de la era Valverde.

En los carteles para promocionar el encuentro aparecían Messi, Neymar y Piqué, pero ningunos de los tres, el brasileño por motivos obvios, estuvieron en el Nou Estadi. Tampoco Iniesta o Piqué acudieron a lo que se había presentado como un partido de entreno para celebrar el 125 aniversario del Gimnàstic de Tarragona. De inicio, la manija para Samper, Sergi Roberto y Aleñá y las bandas para Denis Suárez y Arda. Arriba, Alcácer. En ese contexto, el Nàstic de Lluís Carreras, invicto en pretemporada y que le calzó un 2-0 al Villarreal, hizo una puesta en escena chispeante. La banda derecha, la que Valverde había dejado en manos de Semedo, concentró las principales ocasiones de peligro. El chileno Delgado fue el encargado de poner a prueba al nuevo fichaje del Barça y lo desbordó en la mayoría de desafíos. Cierto que el portugués encontró en Arda Turan un socio poco solidario. Ahí, en la izquierda grana, se coció el gol de Manu Barreiro. Corría el minuto nueve y en una jugada de desacierto defensivo generalizado, en la que se lesionó Vermaelen, el Nàstic encontró el premio. El gol en contra no despertó al Barça y fueron los locales, otra vez por la izquierda con Delgado y Abraham, quienes pusieron en aprietos a Semedo y exigieron a los centrales Mascherano y Marlon.

Durante el primer tiempo el balance ofensivo blaugrana se resumió en un par de disparos muy desenfocados de Sergi Roberto, a quien su origen reusense le costó la guasa del público, y un chut muy tibio de Alcácer.

En la segunda parte Valverde vació el banquillo y dio entrada a Ter Stegen por Cillessen. También pisaron césped Munir, André Gomes, Alba, Douglas y Deulofeu. El de Riudarenes hizo su redebut con el Barça y en media hora apenas dejó un par de destellos de su velocidad. El Barça mostró más verticalidad , pero se encalló en los tres cuartos. Ni tan siquiera aprovechó el hecho de que los locales jugaran en la retaguardia izquierda con Suzuki, un central poco acostumbrado a lidiar cerca de la cal. El tapón del Barça en ataque se prolongó y el gol llegó tras una falta ejecutada con potencia y colocación por Paco Alcácer en el minuto 78. Antes, el árbitro le había anulado el 2-0 al Nàstic.

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