Nadal ahorra combustible
Con solo 7h 54m en cinco partidos, el balear es el semifinalista que menos tiempo ha invertido en la pista. Le superan tanto su rival, Thiem (9h 39m), como Murray (13h 43m) y Wawrinka (10h 43m)
“¡Una serie más, va!”. Empapado en sudor, con la camiseta completamente adherida a su cuerpo y goteando de arriba abajo, Rafael Nadal pedía este jueves a sus técnicos una dosis extra de trabajo. Peloteaba y castigaba bolas en la pista 4, bajo un sol de justicia en París, mientras en la pista paralela el rival al que se medirá mañana en las semifinales, Dominic Thiem, se aplicaba también con una intensidad muy elevada bajo la atenta supervisión de su padre y su preparador. Ahora bien, lo de Nadal en los entrenamientos es un espectáculo único.
Ayer, apesadumbrado por el mal fario de Carreño, buen amigo suyo, el balear intentaba relativizar toda la estadística que le acompaña, que habla de su Roland Garros más imponente tanto en términos de sets cedidos como de tiempo. De camino a las semifinales, el mallorquín ha empleado menos de ocho horas en la pista; en concreto, 7h 54m, lo que rebaja de forma ostensible la cifra de 2008, la edición en la que ganó con mayor exuberancia el grande francés. Aquel año, Nadal permaneció 10h 14m en la pista durante los cinco primeros partidos.
Además, el balear también se ha superado esta campaña en cuanto a resolución. De momento, en los cinco compromisos ante Benoit Paire, Robin Haase, Nikoloz Basilashvili, Roberto Bautista y Carreño, tan solo ha cedido 22 juegos; es decir, tres menos que en 2008 frente a Thomaz Bellucci, Nicolas Devilder, Jarkko Nieminem, Fernando Verdasco y Nicolás Almagro.
Gracias a su magnífico estado de forma, Nadal (31 años) ha logrado economizar su estancia sobre la arcilla parisina y dosificar fuerzas. El desgaste es muy inferior al de los otros tres semifinalistas: el escocés Andy Murray (13h 43m), citado con el suizo Stan Wawrinka (10h 43m) en la primera semifinal (a las 12.30), y el propio Dominic Thiem, que tampoco se ha demorado en exceso (9h 39m) en sus encuentros con Bernard Tomic, Simone Bolelli, Steve Johnson y Horacio Zeballos.
Regresará al podio dos años después
“Cuando es mucho es mucho, y cuando es poco es poco. Es hablar por hablar. Vengo jugando bien y el resto ya se verá. Estoy en las semifinales, que es lo que quería. Eso es todo”, expresó el número cuatro, que con el triunfo frente a Carreño elevó a 100 el número de victorias en tierra en partidos a cinco sets, y que se garantizó su regreso al podio del ranking el próximo lunes, independientemente de lo que pase de ahora en adelante.
Si Wawrinka no levanta el título, Nadal será número dos, y en caso contrario subirá una plaza. No alcanza esa cota tan alta desde el 23 de marzo de 2015. Ayer, cuestionado ante las cámaras de Eurosport por el ahorro de combustible y su trazado en París, sin contratiempos ni apuros, resolvió: “La verdad es que no he pasado por momentos complicados y hay veces que es necesario pasar por momentos complicados… La realidad es que he jugado bien todos los partidos, no he tenido altibajos y eso es lo más positivo. Ahora tengo que jugar ante el rival más difícil, sin ninguna duda".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.