Sergio Rodríguez: “Necesitaba reinventarme”
El 1 de julio se convertirá en agente libre después de disputar 68 partidos con los Sixers de Filadelfia. El Chacho repasa la temporada de su regreso a la NBA y analiza su futuro inmediato
Cuenta su primer entrenador que, de pequeño, Sergio Rodríguez era un “jiribilla” que soñaba con driblar gigantes rumbo a la canasta. Aquel niño hiperactivo al que dirigió Pepe Luque en los infantiles del Unelco La Salle de Tenerife, allá por 1996, es ahora un treintañero que destila una serena satisfacción tras cerrar su curso de vuelta a la NBA. “Ha ido todo muy bien”, repite. El 1 de julio, El Chacho se convertirá en agente libre después de disputar 68 partidos con los Sixers de Filadelfia con una media de 7,8 puntos, 5,1 asistencias, 2,3 rebotes en 22,3 minutos. En su camiseta se lee Persigue tu sueño; supera los obstáculos, el eslogan de su patrocinador, Bridgestone, y su lema de vida.
Pregunta. ¿Qué nota se pone en su vuelta a la NBA?
Respuesta. No lo sé, pero me he encontrado comodísimo. Pasé de pelear por ganar cada partido y conquistar títulos a entrar en un equipo en reconstrucción. Pero llegar con 30 años a la NBA, después de toda la experiencia acumulada tanto en Europa como en mi primera etapa en EE UU, me ha permitido llevarlo todo con mucha tranquilidad y sobreponerme a las dificultades. Antes tenía menos paciencia. El año podía haber sido mejor y también peor, pero estoy contento. He sido titular durante casi 40 partidos.
P. ¿Qué ha sido lo más positivo?
R. Era a la vez el nuevo y el veterano y lo he disfrutado. La exigencia de la competición es distinta y he podido sacar más tiempo para mí. He mejorado físicamente y he podido practicar más el tiro. Coincidí de nuevo con John Townsend, el entrenador de tiro que tuve en Portland y que me ayudó en mis dos primeros años en Madrid. Cuando la exigencia por ganar es constante y tienes que prepararte y analizar rivales cada día esas cosas las dejas un poco de lado.
P. ¿Y el futuro?
R. No quiero obsesionarme. El mercado europeo se mueve muy pronto y desde febrero puedes ir hablando con equipos, pero en la NBA hasta el 1 de julio no sabes nada. Mi idea es seguir en la NBA. Tengo confianza en las opciones que van a venir. Quiero que este sea el primero de varios años. Regresé para competir contra los mejores y en el futuro, dependiendo del equipo, poder luchar por estar en los playoffs o por cotas mayores. Se trataba de adaptarme a algo diferente. Necesitaba el reto de tener que reinventarme, de poder desenvolverme bien fuera de mi zona de confort y lo he conseguido. Ahora quiero darle continuidad.
P. ¿Qué NBA ha encontrado?
R. Ha sido un año espectacular, de récords individuales y colectivos. Lo de Westbrook, Harden, LeBron, Kawhi Leonard… es impresionante. Pero también las situaciones tácticas, cómo se está potenciando que todos los jugadores abran el campo para que haya más espacios, cómo se está moviendo el triple… Y después la importancia de los datos. Hay estadísticas de todo. Se maneja una cantidad de información brutal más allá del partido.
P. ¿Ha seguido el baloncesto europeo?
R. He seguido sobre todo al Madrid claro y, en las últimas semanas, también al Tenerife en su andadura europea. Quiero que le vaya muy bien al Madrid, han sido mis compañeros durante seis años y les tengo mucho cariño.
P. ¿Qué pronóstico hace para la Finales de la NBA y para la Final Four de la Euroliga?
R. En la NBA creo que va a ganar Cleveland, les veo con mucha confianza. Después de haber ganado el año pasado remontando van a imponer esa autoestima. Y, en la Final Four, el Fenerbahçe tiene el factor cancha a favor y eso puede ser decisivo entre cuatro equipos con tanta igualdad y experiencia. Pero el Madrid conoce el camino, es un equipo muy ganador y sabe competir. Ojalá ganen la Décima.
P. ¿Le preguntan en la NBA por Doncic y Llull?
R. Claro que me preguntan. Doncic es un chico muy maduro, con muchísimo talento y conocimiento del juego. El año que viene estará muy cotizado en el en el draft. Y la temporada de Llull es extraordinaria por constancia y regularidad, pero al final las decisiones son de cada uno.
P. ¿Y, en septiembre, el reto del Eurobasket?
R. Es maravilloso estar en ese equipo. Llevo cinco veranos seguidos y para mí es muy importante estar en la selección y seguir alcanzando sueños.
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