El Sevilla pilla al Atlético
Trabajada victoria del conjunto andaluz ante un Celta que peleó hasta el final a pesar de jugar casi toda la segunda parte con 10
Triunfo de enorme importancia del Sevilla, lleno de sufrimiento frente a un buen Celta, que peleó hasta el final a pesar de jugar gran parte de la segunda mitad con un futbolista menos por la expulsión de Pablo Hernández. Los de Jorge Sampaoli alcanzan al Atlético de Madrid en la tercera plaza, con 68 puntos, y se distancian en ocho del Villarreal, quinto clasificado. Una victoria asentada en la fe y la garra. También gracias a una enorme combinación entre Nasri y Ben Yedder que acabó con el Celta. Los de Berizzo demostraron una gran profesionalidad y, aunque tienen la mente en la semifinal de la Liga Europa ante el Manchester United, fueron competitivos. El Sevilla siempre quiso más y dio hasta tres balones en los palos. Ha perdido juego y dinamismo, pero demostró carácter para ganar un partido vital en la persecución de sus objetivos. Gustaron los detalles de Ganso y de Nasri, que volvió al equipo, aunque lo más significativo ante el futuro es el enorme proyecto de jugador que es Correa. El argentino tiene velocidad, desborde y calidad, cualidades que serán definitivas en el momento que adquiera experiencia y frialdad frente a la meta contraria.
Partido de enorme trascendencia para el Sevilla, al que la derrota del Atlético ante el Villarreal le permitía, en caso de conseguir la victoria, alcanzar al conjunto madrileño en la tercera plaza. Sampaoli optó por dar continuidad al equipo que derrotó al Granada y pronto se vio que este choque ante el Celta apenas tenía nada que ver con el derbi regional de la pasada jornada. Esta vez no compareció el equipo resacoso que cayó ante el Betis en Balaídos. Berizzo puso a su once de gala y, aunque sus futbolistas solo piensan en la semifinal ante el Manchester United, salió a flote lo bien trabajado que está este Celta. Seguro en defensa, con una presión fantástica en todo el campo, el conjunto gallego incomodó al Sevilla. Quizás no tanto en ataque, donde Aspas y Guidetti apenas aparecieron. Mucho más en el orden y la buena colocación de sus jugadores.
Un buen Correa
Al Sevilla ya no le valía Ganso, como ante el Granada. El brasileño, un artista, juega andando. Eso, con rivales como el Celta, ya no vale aunque deje taconazos de ensueño o acciones de lujo como una vaselina ante Sergio. Al conjunto andaluz lo sostuvieron las carreras de Correa y el empuje de Iborra. Este Sevilla de Sampaoli ha perdido frescura, pero conserva la fe y el empuje. Iborra pudo marcar en un gran remate de cabeza al palo y Correa daba muestras de su calidad. Al descanso se llegó con el cero a cero y un penalti por manos de Iborra que el colegiado Gil Manzano no pitó.
Correa marcó un golazo nada más iniciarse la segunda mitad. El Sevilla, en lugar de cerrar el partido, concedió un penalti infantil por medio de Lenglet. Aspas empató y el miedo recorrió las gradas de Nervión en la lluviosa noche sevillana. Pablo Hernández fue expulsado y el Sevilla, revitalizado por Nasri, buscó el segundo gol con ahínco. Escudero y Nasri enviaron al larguero hasta que Ben Yedder, un delantero, decidió. Sampaoli no suele contar demasiado con sus servicios, confiando más en Jovetic, pero el pequeño delantero francés lleva el gol en la sangre. Su acción a pase de Nasri, que definió el partido, puede valer, de paso, toda una clasificación para la previa de la Liga de Campeones mientras se pelea por la tercera plaza. El respiro en el Sánchez Pizjuán fue grande porque se puede seguir soñando con la tercera plaza. El Celta, valiente con 10, incomodó hasta el último suspiro. La batalla de Sevilla tenía relativa importancia para los gallegos. Lo importante responde a los nombres de Liga Europa y Manchester United.
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