El Barça mira al pasado

El Barcelona cayó este miércoles en los cuartos de final de la Liga de Campeones por tercera vez en los últimos cuatro años. En las dos ocasiones anteriores fue el Atlético de Simeone el que le dijo adiós al Barça: la temporada pasada, con Luis Enrique, y en el curso 2013-2014, cuando el Tata Martino se sentaba en el banquillo del Camp Nou. La última vez que el cuadro azulgrana pasó la ronda de los ocho mejores de Europa fue en la temporada 2014-2015, cuando conquistó su quinta Orejona en Berlín ante la Juventus. Precisamente el rival que esta campaña lo echó de la Champions.

Dos temporadas después, la Juventus conserva las formas, no el fondo. Solo hay dos sobrevivientes del equipo que perdió la final de Berlín: el interminable Buffon y el central Bonucci. Enfilada a ganar su sexta liga italiana consecutiva, la Juve tiene una cuenta pendiente con Europa y se reinventó. Al Barcelona le pasa todo lo contrario. De los 11 futbolistas que saltaron al campo en el partido decisivo de la Liga de Campeones de la temporada 2014-2015, este miércoles solo faltaron dos: Dani Alves, que ahora juega en la Juve, y Mascherano, que saltó al campo en el segundo tiempo.

El Barcelona invirtió en futbolistas jóvenes el pasado mercado de verano: pagó 123 millones de euros en seis jugadores que tienen una media de edad de 23,6. Solo Umtiti jugó ante la Juve. El equipo de Allegri, beneficiado por la venta récord de Pogba (120 millones al Manchester United), se gastó 175 millones en nueve jugadores, y cuatro (Higuaín, Cuadrado, Pjanic y Dani Alves) estuvieron presentes en el Camp Nou.

Con la final de la Copa agendada y a la espera de asaltar el Bernabéu para conservar sus opciones de luchar por la Liga, el Barça se ha aferrado al pasado y ahora debe mirar al futuro. La Juve se reinventa y piensa en Cardiff.