Hamilton gana en el GP de Montecarlo por delante de Ricciardo
Fernando Alonso termina quinto y Carlos Sainz octavo y Sergio Pérez consigue la tercera plaza
Montecarlo recuperó la magia. En contraste con las anodinas carreras que se habían vivido algunos años, esta vez el Gran Premio de Mónaco se convirtió en un auténtico quebradero de cabeza para todos los equipos y para los mismos pilotos. La aparición de la lluvia justo antes del inicio de la carrera, convirtió el circuito en un escenario excelente para la realización de la obra de arte que ofrecieron los protagonistas. La lucha que mantuvieron el Mercedes de Lewis Hamilton y el Red Bull de Daniel Ricciardo fue una parte fundamental del espectáculo. Y al final, la victoria fue para el británico que superó al australiano y al mejicano Sergio Pérez, que completó el podio. Nico Rosberg, con problemas en su Mercedes, acabó séptimo y cedió 19 puntos a su compañero de equipo en la clasificación del Mundial, que sigue dominando con 106 puntos, 24 más que su rival.
Cuando completas una carrera de tanta dificultad es una gran sensación" Fernando Alonso
Sin embargo, la carrera concedió momentos de alegría para unos y de desespero para otros, que incidieron de forma definitiva en el resultado final. La salida se produjo bajo el control del coche de seguridad, que se mantuvo durante siete vueltas en la pista. Después, Ricciardo se estiró y dejó que fueran los dos Mercedes quienes dirimieran su batalla interna. Hamilton atacando a Rosberg y el alemán sufriendo problemas de sobrecalentamiento de los frenos que le obligaron finalmente a ceder el paso a su compañero. Entonces comenzó la gran batalla que se mantendría hasta la bandera a cuadros.
El tiempo fue mejorando y la estrategia de los equipos debió ajustarse para no perjudicar a sus pilotos. Ricciardo decidió calzar los neumáticos intermedios superadas las 22 primeras vueltas. Y algo similar hizo Nico Rosberg. Pero el británico Lewis Hamilton optó por mantenerse con los extremos y agotarlos hasta la 30ª vuelta, intentando evitarse una parada. Así que, pasó de los extremos a los ultra blandos y recuperó el liderato cuando sus inmediatos rivales tuvieron que pasar de nuevo por el taller para calzar los ultra blandos (Rosberg) y los super blandos (Ricciardo).
La estrategia estaba marcada. La cuestión era comprobar si Hamilton conseguiría mantenerse en carrera sin tener que realizar otra parada, dada la mayor degradación de los neumáticos ultra blandos. Y la verdad es que su decisión resultó ser la acertada, porque consiguió concluir la carrera sin volver a pasar por su taller. Ricciardo se desesperó porque ninguno de los ataques que realizó sobre el británico obtuvo el resultado esperado. Tenía mejor ritmo y hubiera superado a Hamilton en cualquier otro circuito, pero Montecarlo protege a los líderes: adelantar es prácticamente imposible. El premio para Hamilton fue doble, puesto que además de conseguir su 44ª victoria, se benefició de los problemas que tuvo Rosberg que le relegaron hasta la séptima posición. Las diferencias en el Mundial se estrechan.
Fernando Alonso realizó una carrera espectacular, acertando en la estrategia y encontrando el mejor momento para realizar su cambio de neumáticos, hasta auparse hasta la tercera posición cuando sus rivales acababan de entrar en el taller y manteniéndose después en una sólida quinta posición para afrontar las 20 últimas vueltas. El asturiano mantuvo un gran ritmo de carrera con los tres tipos de neumáticos que utilizó, los extremos, los intermedios y los superblandos. Y en la parte final, aguantó el ataque de Rosberg y le acabó sacando una diferencia sustancial que le permitió acabar tranquilo. Rosberg, en cambio, perdió la sexta posición en las últimas curvas. Hulkenberg le adelantó. El quinto puesto de Alonso es el mejor resultado que ha conseguido desde que dejó Ferrari. Y certifica la mejora de McLaren.
“Esto sabe bien”, indicó Alonso. “Cuando completas una carrera de tanta dificultad es una gran sensación. Cuando pusimos los intermedios había que intuir el agarre. Y al colocar los neumáticos de seco era complicado porque la trazada era difícil. El resultado es el mejor del año hasta el momento, pero quedan muchas cosas por mejorar. Iremos a Canadá con mejoras importantes en el motor y veremos de lo que seremos capaces”.
También Carlos Sainz se mantuvo entre los mejores, alcanzando la tercera posición y luchando incluso por el podio, hasta que su equipo realizó un pésimo cambio de neumáticos en la 21ª vuelta. Carlos perdió allí unos segundos cruciales, que le relegaron hasta la octava posición. Su enfado fue importante, pero siguió luchando para asegurarse una buena clasificación. Su compañero de equipo, Daniil Kvyat sufrió un accidente cuando intentó adelantar a Magnussen por el interior en una curva a la derecha, y acabó empotrado contra la valla protectora. Era la 20ª vuelta y se vio obligado a abandonar la carrera.
“Hoy había más puntos que coger en esta carrera”, señaló un desilusionado Carlos Sainz. “Yo no podía hacer más de lo que he hecho. Habrá que estudiar qué ocurrió en el pit stop, porque fue un error. En la parte final, iba más rápido que los pilotos que me precedían, pero aquí es imposible adelantar”.
