Un descenso de calculadora

Parecía tan barata como hace un año, pero la pasada jornada ganaron sus partidos tres de los cuatro últimos clasificados y se ha encarecido. La lucha por evitar el descenso a Segunda División pasará este domingo por una estación clave, la penúltima, justo en una campaña en la que resulta de extrema importancia quedarse entre los grandes porque todos los equipos de la clase media-baja de la Liga esperan duplicar la próxima campaña sus ingresos por derechos de televisión si consiguen la permanencia. 

Hay un listón que se apunta como salvador, el de los 40 puntos finales. No garantiza nada, pero a él no llegarán al menos o Getafe o Sporting, que se enfrentan el domingo entre sí. Y que no valiese supondría una concatenación de resultados, entre ellos que el Granada le arañase al menos un empate al Barcelona en la jornada final con la Liga en juego para los culés. Hay ocho equipos involucrados, ocho dinámicas y realidades diferentes, pero el mismo anhelo final: evitar las dos plazas que acompañarán al Levante en el camino hacia Segunda División. 

Betis (41 puntos). Se le da por salvado, pero de las más de 59.000 combinaciones de resultados que aún son factibles hay ocho que le mandarían al descenso. Sería demasiado rocambolesco, pero si esta jornada cae en Eibar, suman Deportivo y Espanyol y ganan Granada, Rayo y Getafe llegaría a la última jornada con la matemática todavía amenazando. Aún así habría que esperar otra carambola más. 

Espanyol (40 puntos). Está en el tope que se da por bueno, pero que todavía validan las matemáticas. Visita el Camp Nou y brotan las alusiones pericas a salvarse en casa de su rival local y reeditar el tamudazo que frustró para el Barcelona la liga del 2007 a idéntica altura del campeonato, cerró la etapa de Rijkaard y abrió la de Guardiola. En todo caso, el Espanyol guarda una bala porque cierra la liga en casa contra el Eibar, ya salvado. 

Deportivo (39 puntos). Es el equipo en peor dinámica. A falta de dos partidos para acabar la primera vuelta era sexto con 27 puntos. Desde entonces ha sumado doce tras ganar apenas un partido, en casa, contra el colista Levante y con un gol al final marcado por los valencianos en propia meta. El crédito de Víctor Sánchez del Amo está agotado y no parece probable que siga al frente del equipo pese a haber renovado en enero. “Nuestra confianza está mermada”, reconoce Álex Bergantiños. Acaba en Riazor contra el Real Madrid, por eso quiere zanjar la permanencia en Villarreal con un triunfo ante un rival que ya ha cumplido su objetivo, pero incluso perdiendo puede dejar El Madrigal salvado. 

Granada (36 puntos). El presidente Quique Pina ha sacado la chequera y abonará el importe de las entradas de los aficionados del equipo que se desplacen al Sánchez Pizjuán el domingo. “La único condición que pongo es que sean respetuosos con los aficionados del Sevilla, incluidos los Biris (el grupo de radicales que se asienta en el fondo norte del estadio sevillano). He viajado mucho allí a ver fútbol porque me han invitado y soy fan de sus aficionados”, apunta Pina, que asume una máxima ante la posterior visita del Barcelona: “El empate en Sevilla no nos lleva a ningún sitio”. Si gana se salva siempre que se produzca uno de estos dos resultados: un empate entre Getafe y Sporting o una derrota del Rayo en San Sebastián. 

Rayo Vallecano (35 puntos). Sabe que si gana los dos partidos que le quedan seguirá entre los grandes y enfrente tendrá a dos rivales sin apreturas clasificatorias, la Real Sociedad, que está en tierra de nadie, y el Levante, ya descendido. Las sensaciones son buenas tras llevar al límite en las dos últimas jornadas nada menos que a los dos finalistas de la Champions, pero apenas hay margen para el error. El club también pone autocares gratuítos y subvenciona una parte del coste de las entradas para que el equipo sienta el apoyo de su gente en Anoeta

Sporting (35 puntos). Acude a Getafe para disputar un duelo directo y también propiciará una notable migración de aficionados. Será equipo de Segunda si pierde y Rayo o Granada, bastaría uno de los dos, ganan en sus citas. Y como tiene casi todos los desempates perdidos un empate en terreno madrileño también le dejaría en una situación muy delicada. Eso sí, la victoria le encaminaría a la permanencia con un partido final en El Molinón frente al Villarreal. “La tensión será enorme”, vaticina el defensa Luis Hernández sobre el partido de Getafe.

 Getafe (35 puntos). El peor equipo de la segunda vuelta junto al Deportivo ha sumado siete de los últimos nueve puntos en juego. Si pierde con el Sporting y Rayo y Granada ganan sus partidos de nada le habrá servido este despertar final porque rubricará el primer descenso a Segunda de su historia tras doce campañas en la élite. Si gana deberá rubricar la salvación en el campo del Betis.