¿Cómo llega el Real Madrid al clásico?

Temía el Barcelona que el equipo se desplomaría sin Leo Messi. El argentino se lesionó a finales de septiembre y resulta que el equipo de Luis Enrique ha ido cumpliendo estos dos meses. Tanto que el sábado se presentará en el Bernabéu como líder. Tres puntos le saca al Madrid de Benítez que, en el Sánchez Pizjuán, perdió hace dos semanas su primer partido en lo que va de temporada. Hasta entonces, las victorias y las paradas de Keylor Navas habían maquillado las dudas sobre su juego y el estado de forma de algunos jugadores. ¿Cómo llega ahora el Madrid al clásico?

Enfermería casi vacía

Hasta 12 jugadores han pasado por enfermería de Valdebebas en lo que va de temporada. James es el que más tiempo (dos meses) ha estado parado. Dos días antes del clásico, Benítez recupera a casi todos sus efectivos. Carvajal, que no juega desde el derbi en el Calderón por una lesión en los tendones peroneos del tobillo, lleva una semana entrenándose con normalidad y estará disponible para el sábado. Marcelo, que fue baja en Sevilla por una sobrecarga, también ha trabajado con el grupo. Sergio Ramos e Isco, que no acudieron a la llamada de la selección española, también están disponibles. En el caso del central, que volvió a recaer de la lesión de hombro, con matices. Es decir, tendrá que infiltrarse de nuevo para jugar hasta que decida pasar por el quirófano. Arbeloa, con un problema en el talón desde el partido del Calderón, ha trabajado con el grupo. Danilo regresa hoy de un largo viaje con su selección con la que no ha disputado ni un minuto. Lo mismo que James, que sí ha jugado con Colombia. Varane disputó 180 minutos con Francia, Nacho ninguno con España y Pepe 90 con Portugal.

La incógnita Benzema

La única duda de Rafa Benítez es la de Karim Benzema. Recuperado de la lesión muscular en el bíceps, el francés ha tenido molestias en los isquios en los últimos días. No juega desde el derbi en el Calderón. De llegar al clásico, la incógnita es saber en qué condiciones llega. En Valdebebas dicen verle muy afectado por la imputación en el caso del chantaje sexual a Valbuena (de ser declarado culpable se enfrentaría a una pena de cinco años de cárcel) y por los atentados de París.

Una delantera con altibajos

El Madrid es el equipo más goleador del campeonato (26 tantos por los 25 del Barcelona), pero esta es la cifra más baja, a estas alturas de temporada, desde la Liga de 2007-08 (25 en la jornada 11). La temporada pasada el equipo llevaba 42 goles, 16 más que esta. El equipo, muy estático, sufre mucho sin el juego asociativo de Benzema. Cristiano lleva 13 tantos, su peor registro desde que llegó a Chamartín. Se quedó sin marcar contra los rivales de más peso (Sevilla, PSG en la ida y en la vuelta y Atlético) y se le ve desconectado del juego del equipo.

La seguridad de Keylor Navas

El portero del Real Madrid, baja en Sevilla por una sobrecarga que arrastra desde el partido en París contra el PSG, se unió ayer al trabajo de grupo y estará disponible para el clásico. En los dos partidos que se perdió (Sevilla y Las Palmas), el equipo encajó cuatro goles, más de la mitad de los totales (siete).

El papel de Casemiro

El centrocampista brasileño ha entrado en el once titular con la lesión de James y el cambio de esquema de Benítez. En el 4-2-3-1 de principio de temporada, no tenía hueco; con el 4-3-3 ha ido sujetando la medular del Madrid, a veces jugando entre los defensas y la pareja Modric-Kroos y otras jugando a su lado. El brasileño es el jugador más en forma del equipo y ha disputado los últimos ocho partidos seguidos. Fundamental en la búsqueda del equilibrio que anhela Benítez, queda por ver si ahora que el técnico tiene a toda la plantilla disponible, Casemiro seguirá de titular o se sentará en el banquillo.

La urgencia de Benítez

Hasta el partido en el Sánchez Pizjuán, Benítez tiró de estadísticas para defender el juego, poco atractivo, del Madrid. “Somos el equipo que más remata a puerta; todos los entrenadores firmarían por ser primeros de grupo y clasificados para octavos de Champions con dos turnos de antelación, firmarían ser líderes en la Liga y ser imbatidos en España y Europa”, repetía. Las estadísticas estaban de su lado (conseguidas, además, gracias a las buenas respuestas de los suplentes), pero el juego del equipo seguía generando dudas: poco fluido, a veces desordenado atrás y sin empuje. La derrota en Sevilla abrió la caja de los truenos. El equipo de Emery aplastó al Madrid y Benítez dijo que los suyos habían jugado una muy buena media hora y que le faltó saber estar. Ahora llega el Barcelona. Una derrota de los azulgrana dejaría a los blancos a seis puntos y al Madrid con aún más dudas.