El Rayo logra su primera victoria en Gran Canaria
El equipo de Paco Jémez ahoga cuando no tiene la pelota y propone cuando dispone de ella
El Rayo Vallecano logró su primera victoria de la temporada en el Estadio de Gran Canaria, en el retorno de Paco Jémez a la isla. Rentabilizó un gol en los estertores del primer tiempo, con una sutileza de Javi Guerra que la picó por encima de Raúl Lizoain para anotar el único tanto del encuentro. La Unión Deportiva Las Palmas tiene ahora por delante la visita del Sevilla y un desplazamiento al Camp Nou en siete días. El Rayo recibirá al Sporting de Gijón con optimismo y visitará el Pizjuan esta semana.
Las Palmas, 0-Rayo Vallecano, 1
Las Palmas: Lizoain; Simón, Alcaraz, Artiles, Bigas, Castellano; Roque (José m. 71), Hernán (El Zhar m. 61), Culio (Wakaso m. 61); Viera y Araujo. No utilizados: Lorenzo, Vicente, García y Valerón.
Rayo Vallecano: Toño; Nacho, Llorente, Amaya, Rat; Baena, Trashorras; Embarba (Jozabed m. 54), Hernández, Bebé (Quini m. 87) y Javi Guerra (Manucho m. 75).
No utilizados: Fariña, Carlos, Zhang y Lass.
Gol: 0-1 M. 41. Javi Guerra.
Árbitro: González González. Amonestó
a El-Zhar, Araujo, Nacho, Amaya, Rat, Baena y Embarba.
Gran Canaria. Unos 20.000 espectadores.
La primera fase del partido transcurrió con la Unión Deportiva enseñando cuáles son ahora mismo sus armas: un tridente compuesto por dos delantero y un defensa (Araujo, Viera y David Simón) y dos canteranos, Hernán y Roque, que sostienen la medular con aspecto de veteranos, tras años curtidos en la peleada Liga Adelante.
Lo de David Simón es serio. Aunque es cierto que el sistema de Paco Herrera está hecho para que los laterales sean protagonistas y tengan su espalda cubierta, David Simón transita por el terreno de juego con superioridad en todas las facetas. Delantero de niño, el fútbol le ha colocado en la retaguardia, al menos sobre el papel. Él se mueve con soltura de extremo en ataque y su condición física le permite defender a gran altura. Su renovación ha calmado a más de uno en los despachos de la Unión Deportiva Las Palmas.
Bebé mostró intenciones en la franja izquierda del Rayo que se sobrepuso al dominio amarillo. Dio un par de punzadas antes de que Trashorras, siempre flotador de Jémez en la medular, golpeó de cabeza para crear una asistencia a Javi Guerra que la cazó dentro del área y la picó ante Raúl Lizoain para que el balón acabara dentro de las mallas. Minuto 41 y el Rayo se fue de forma inmerecida arriba al descanso.
El golpe del gol marcó el inicio del segundo tramo del encuentro. La Unión Deportiva saltó descompuesta al maltrecho terreno de juego y su míster, Paco Herrera, intentó llamar la atención del equipo con dos cambios. Debutó Wakaso e ingresó también El Zhar, sustituyendo a Culio y Hernán, que hizo un buen primer tiempo. Acumuló delanteros Herrera introduciendo también a William José, pero deshilachó la medular retirando a Roque Mesa. Mientras el Rayo, intimidaba con Jozabed, que la tuvo para terminar de tumbar al equipo canario. Y con la entrada de Manucho refrescó la delantera que siguió generando tensión en la defensa amarilla. El equipo de Paco Jémez ahoga cuando no tiene la pelota y propone cuando dispone de ella. Inventa un equipo cada año y todas las temporadas sigue en pie, ordenado, con una presión efectiva.
Con intervalos de juego aburrido en un campo de fútbol que más parece el resultado de una batalla, impresentable en la Liga BBVA, el Rayo condujo la segunda parte con el balón alejado de su área e incluso disponiendo de oportunidades para sentenciar el encuentro. Los delanteros amarillos se difuminaron y los recambios no mostraron más que ganas y algo de ansiedad. Al final, Jémez se va de Gran Canaria con los tres puntos y la victoria en su regreso ante una afición que lo adora.
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