Del Bosque: “Tuvimos más juego que ocasiones”

La animosidad que el sábado mediodía burbujeaba en el casco viejo y la trascendencia que el duelo tenía para España invitaba a pensar en un estadio lleno. En las terrazas corría la sidra y algunos esforzados eslovacos trataban de escanciarla con poca maña. La ciudad, que recuperó el nervio futbolero con ese esfuerzo colectivo que salvó al Oviedo en 2012 y lo ha incrementado con el regreso a Segunda División, se había entregado en los entrenamientos previos. Hacía ocho años que España no se presentaba en el Carlos Tartiere. Sin embargo, a poco de empezar el encuentro, las calvas en las tribunas altas de los laterales y de un fondo fueron una sorpresa. Los precios, entre 20 y 55 euros, eran los habituales en los partidos de la selección.

La abundancia de huecos permitía a los aficionados con localidades esquinadas desplazarse a butacas más centradas. A la espera de la Eurocopa, quizá el desenganche de parte de la hinchada con la selección sea mayor del que se intuye. Hacía tiempo que un partido oficial de España no ofrecía tanto asiento libre. De las 30.000 plazas asientos del Tartiere, apenas se sobrepasaron los 20.000. En la Federación argumentan que cuando se pusieron las entradas a la venta fue en el mes de agosto "y la gente estaba de vacaciones". "Además", añade un directivo, "también son fiestas aquí en breve y empiezan los gastos de los colegios". "Se han devuelto paquetes de entradas de algunas delegaciones", sostiene un empleado federativo. “Me hubiera gustado que estuviera lleno, pero si hubo dos tercios es para estar satisfechos”, decía Vicente del Bosque. 

Un error inicial de Jordi Alba en una entrega que acabó en córner y otro de Ramos que provocó un disparo cruzado de Mak se sumaron a esa sensación de cierto desangelo que se desprendía de la. Hasta que Silva, Pedro, Iniesta y Jordi Alba entendieron que en la banda derecha de Eslovaquia existía un filón. A partir de que Alba - 6 goles con la selección-, salvara a Kozacik con ese cabezazo cruzado tras su sopresivo desmarque y un pase de Silva perfecto, la grada disfrutó de momentos de toque y arabescos de Silva e Iniesta excelsos.

Me hubiera gustado que el estadio estuviera lleno" Del Bosque

"El. guión que teníamos previsto es el que se dio, hemos sabido resolver los problemas que nos iban a plantear. Movimos bien y rápido el balón y contrarrestamos bien su contragolpe, aunque reconozco que desarrollamos más fútbol que desarrollado más futbol que ocasiones de gol”, analiza el seleccionador. A Del Bosque no le pasó por alto que, con un 75% de posesión de balón y jugando casi todo el partido en campo contrario, España solo remató tres veces entre los tres palos sobre un total de 14 disparos. “No es fácil tirar a gol cuando hay una acumulación tan grande de jugadores en el área contraria”, defendió Del Bosque”

El contrapunto a tanto pase fue la verticalidad que le dio Cesc a una recuperación para lanzar a Diego Costa por detrás de la defensa eslovaca en el penalti que supuso el 2-0 y que España, además de liderar el grupo le gane el goal average a Eslovaquia. “A todos nos gustaría ser más profundos, no solo tenemos la posesión por tenerla”, concluyó Del Bosque.

Hemos jugado como antaño, necesitábamos este triunfo" Iker Casillas

Casillas, que como capitán  habló de tratar de involucrar a todos los actores en el caso de los pitos a Piqué, incluido al propio central del Barça, del que dijo que "lo mismo hay que corregirle algunas cosas", estuvo en la línea del seleccionador, al analizar el partido: "Se ha jugado muy bien, como antaño. Los problemas en los partidos anteriores es que estábamos muy cargados por el calendario y era complicada adaptarse a la selección".