El Atlético se mide al exótico Astana, al Benfica y al Galatasaray

El bombo le deparó al Atlético dos clásicos —el Benfica portugués y el Galatasaray turco— y el exótico Astana. El desconocido y lejano club kazajo —de un país situado en Asia central— fue fundado en 2009. Al novato equipo de la república exsoviética le ha situado en el mapa el compartir el nombre con el conjunto ciclista y su sorprendente clasificación para esta fase de grupos de la Liga de Campeones. Su estrella y héroe de la clasificación es el serbio Maksimovic. Este mediocentro llegador aterrizó en el club como parte de una política de captar talentos incipientes de la Europa del Este y los Balcanes. Maksimovic fue el jugador que con su gol le dio a Serbia el último Mundial sub-20 al derrotar a Brasil en la final. También fue el verdugo del Apoel Nicosia en la ronda preliminar y el que ha provocado que el Atlético tenga que realizar el desplazamiento más largos de esta Champions.

El histórico Benfica, dos veces campeón de Europa, mantiene una estrecha relación comercial con el Atlético. El flujo de jugadores entre uno y otro club —con el agente Jorge Mendes de por medio— en los últimos años propiciará los reencuentros de Oblak y Siqueira con su antigua hinchada. A su vez, Salvio, Silvio, Pizzi y el mexicano Raúl Jiménez, la última transacción entre ambas identidades, volverán al Calderón. También juega en el Benfica Gaitán, objeto de deseo imposible de Simeone en las últimas temporadas. El ex valencianista Jonas y el ex malaguista Eliseu son otras caras conocidas. El veterano guardameta brasileño Julio César o el delantero griego Mitroglou dan forma a un plantel que perdió al carismático técnico Jorge Jesús, que decidió dar el paso prohibido de fichar por el eterno rival, el Sporting de Lisboa.

Al Galatasaray lo lidera el ex madridista Wesley Sneijder. A su alrededor aparecen nombres conocidos como el del alemán Podolski, el tanque goleador Yilmaz o el meta uruguayo Muslera. José Rodríguez, cedido por el Madrid este verano, forma junto a Inan la pareja de mediocentros en un equipo en el que la profundidad de sus laterales, Sabri y Telles, será un arma a tener en cuenta por Simeone.