Hamilton y Rosberg dan el séptimo doblete del año a Mercedes

A Nico Rosberg el título Mundial se le está complicando a cada carrera que transcurre. En Bélgica, su compañero de equipo Lewis Hamilton le volvió a superar y le arrebató otros siete puntos en la clasificación, lo que le sitúa ya a 28. Un mundo. Sin embargo, los dos pilotos de Mercedes luchan tranquilos entre sí, sabiendo que ningún otro rival tiene opciones de entrometerse en su guerra particular. La superioridad de los dos Mercedes es tal que Hamilton ha ganado ya seis veces este curso y, junto a Rosberg, le han ofrecido a la marca alemana nada menos que siete dobletes en las 11 carreras disputadas. Hamilton parece caminar directo hacia su tercera corona mundial. Y Mercedes lleva ganadas 25 carreras de las últimas 29 disputadas las dos últimas temporadas. Grosjean (Lotus) fue tercero, Carlos Sainz tuvo que abandonar, Fernando Alonso concluyó decimotercero y el mexicano Checo Pérez cruzó con su Force India en quinta posición.

Si la victoria de Hamilton fue clara desde el mismo momento de la salida y la segunda posición de Rosberg no se concretó hasta después de la segunda parada en el taller -31 vuelta-, después de que una mala salida le relegara hasta la quinta posición, la carrera mantuvo el interés hasta el final, porque la tercera posición no quedó definida hasta la penúltima vuelta. Todo hacia presagiar un nuevo podio de Ferrari, con un Vettel que había competido a lo campeón para ir superando posiciones tras salir desde la octava. Se benefició de los problemas de algunos de sus rivales: abandono de Ricciardo y problema de Bottas en el cambio de ruedas, cuando su equipo le colocó blandas delante y duras detrás por lo que fue sancionado con un paso por el pit-lane.

Y al final pagó su osadía de pretender acabar la carrera con unos neumáticos que llevaban ya 27 vueltas y que habían sufrido mucho más de lo permitido. Vettel iba directo hacia el tercer puesto, acosado por Grosjean en las últimas vueltas, cuando su neumático trasero derecho sufrió un pinchazo y acabó estallando a falta de dos vueltas para el final. Vettel, desesperado, vio como le adelantaba el piloto de Lotus y como le fueron pasando también todo el grupo del pelotón, hasta quedar relegado a la 12ª posición… fuera de los puntos y por detrás de su compañero Kimi Raikkonen, que concluyó séptimo.

Los primeros incidentes se produjeron ya en la salida. Justo en el momento de tomarla, Hulkenberg anunció que su Force India se había quedado sin potencia, lo que obligó a realizar una nueva vuelta de formación. Y poco después el equipo Toro Rosso llamó a su piloto Carlos Sainz para que entrara en el taller para resolver un problema mecánico en su coche. Así que ya de entrada, Sainz perdió cualquier opción de realizar una buena carrera. Regresó a la pista con una vuelta perdida y con limitaciones, hasta que desde el taller le dijeron: “Ahora ya puedes apretar”. Y comenzó su carrera con una vuelta perdida respecto a los últimos clasificados. No consiguió recuperar el terreno cedido y acabó abandonando. Esta vez, su gran rival y compañero de equipo, Verstappen, le superó en toda regla y acabó octavo.

Eliminado prácticamente Sainz, el automovilismo español se centró en las evoluciones de un Fernando Alonso limitado por las ínfimas prestaciones de su monoplaza, el McLaren con motor Honda. Y lo cierto es que el asturiano realizó una excelente salida que le permitió escalar hasta la 12ª posición. Pero después la realidad de su McLaren le fue restituyendo a su precaria situación. A pesar de que se habían producido diversos abandonos –Ricciardo, Maldonado y Hulkenberg-, el doble campeón mundial español no lograba mantener ni siquiera su posición y caía a la 13ª cuando Felipe Nasr (Sauber) le adelantó. Las agresivas y últimas evoluciones de los McLaren no están dando el fruto esperado. Sus coches solo pueden ir por delante de los Mnor de Merhri y Stevens. Cualquier otro resultado es producto de incidentes de los demás equipos, no de los méritos acumulados por Honda o por McLaren.

“La salida fue el momento más divertido. Es donde podemos avanzar a algunos de nuestros rivales y es lo que hicimos”, señaló un decepcionado Alonso. “La carrera ha ido casi mejor de lo que esperábamos. El coche se comportó bien. Nos faltaba bastante potencia en las rectas, pero ya lo sabíamos. En circuitos como Singapur o Japón iremos mejor. Ahora toca ir preparando cosas para la próxima temporada”.