Chile prepara su ‘defensa antiaérea’ ante Uruguay

A pesar de los diversos factores que convierten a Chile en favorita para el duelo de cuartos esta noche contra Uruguay (es anfitriona, ha marcado el 25% de los goles hasta ahora, tiene cuatro jugadores en el ‘once’ ideal del torneo, no ha tenido desplazamientos), la afición local teme la legendaria capacidad charrúa para estropear la fiesta en casa ajena y se muestra, sobre todo, muy cauta ante la principal arma uruguaya, precisamente el flanco más débil de la ‘Roja’: el juego aéreo. Sampaoli, como es habitual, ha practicado obsesivamente en los últimos entrenamientos la defensa de centros al área desde cualquier punto: saques de banda, tiros de esquina, balonazos largos y lanzamientos libres.

Los cabezazos de Godín, Cavani o Giménez quitan el sueño al entrenador argentino, cuya selección es la más baja de la Copa América: una estatura media de 1,76 metros (por 1,80 de los uruguayos). La presencia del intocable Gary Medel como central (1,72) obliga a una estrategia defensiva colectiva, basada en la anticipación. Sampaoli viene insistiendo en ello desde el inicio del campeonato: “Somos los más bajos del torneo y hemos de buscar la anticipación. Seguramente seremos un equipo que busque hacer lo que ha hecho en el último tiempo, jugar por abajo y protagonizar. Tenemos preparado ser un equipo anticipador".

Nunca hasta ahora se verá tan puesto a prueba su esquema defensivo: los dos únicos goles marcados por el conjunto uruguayo en la primera fase (‘Cebolla’ Rodríguez y Giménez) llegaron en jugadas a balón parado. El central tuvo en su cabeza otro gol idéntico, a la salida de un córner, impedido brillantemente por el portero paraguayo Villar. “No es nada del otro mundo que Uruguay haga un gol a pelota detenida”, afirmó el lunes Charles Aránguiz, estrella emergente del plantel andino: “Es lo que más vamos a trabajar […] Necesitamos mucha concentración, no podemos dejar que cabeceen cómodos”.

El fútbol desplegado por Uruguay hasta el momento ha sido pobre en cuanto a elaboración, por momentos cavernícola, salvo la última media hora contra Argentina, cuando Tabárez (perdiendo 1-0) se arriesgó a sacar un tercer atacante (Abel ‘La Joya’ Hernández), juntó a Carlos Sánchez con Álvaro González en la media y puso en serios aprietos a la selección de la otra ribera del Río de la Plata. La contundencia aérea de los charrúas en ataque les ha permitido clasificarse a cuartos, pero han probado también su propia medicina: en los dos goles encajados hasta la fecha, Agüero y Lucas Barrios, cabecearon a la red tras adelantarse, precisamente, a Giménez.

La selección anfitriona planteará un partido diametralmente opuesto al de la vigente campeona: presión agobiante arriba y recuperación de la pelota para circularla a ras de césped y manejar la posesión. Chile juega adelantado, fiel a la escuela de Bielsa. El seleccionador uruguayo, Óscar Tabárez, dijo ayer que se enfrentan “a un equipo que creo conocer bien. Es un equipo desbalanceado intencionalmente hacia el ataque”. Chile cuenta con el arma sorpresiva de Arturo Vidal, que ya metió un gol de cabeza a México en la fase grupal y sorprendió varias veces con llegadas en segunda línea. En ese partido, sin embargo, Chile mostró una preocupante endeblez defensiva. Raúl Jiménez superó con facilidad al propio Vidal y a Jara cuando anotó de cabeza el segundo gol de los aztecas, y pudo meter alguno más. La hinchada chilena confía en la conocida solvencia de Claudio Bravo en los balones aéreos. El jugador más alto de ambas selecciones, Sebastián Coates (1,96) empezará el partido en el banquillo ante el regreso del capitán y líder de la defensa, Diego Godín. Sampaoli, por su parte, se ha decidido por Eugenio Mena en lugar de Beausejour en el lateral izquierdo; será la única novedad respecto a la alineación inicial que arrasó a Bolivia.

Uruguay despertó ayer sobresaltada por la detención del padre de Edinson Cavani, presunto responsable de atropellar mortalmente a un motorista en estado de ebriedad. Al cierre de esta edición no se sabía si el jugador continuaría o no en la concentración charrúa: “Cavani está afectado con la situación. Con el correr de las horas tomará una decisión”, concluyó su seleccionador la rueda de prensa previa a un partido que tendrá, en especial para Chile, un sabor a final.