Caos total en el Parma

“El último sueldo que cobré fue el de julio. No hemos vuelto a cobrar desde entonces. Han sido meses muy duros, nos han tomado el pelo. Nadie nos comunicaba nada, sólo nos decían ‘os vamos a pagar la semana que viene’. Llegaba la semana que viene y nos decían que el próximo mes, llegaba el próximo mes y nos decían el lunes que viene. Y así desde agosto. Hay empleados que no pueden pagar la hipoteca”, cuenta al otro lado del teléfono Felipe, central brasileño del Parma. Va en el coche camino de Parma para recoger sus cosas.

“El último sueldo que cobré fue el de julio. No hemos vuelto a cobrar desde entonces. Nos han tomado el pelo. Hay empleados que no pueden pagar la hipoteca", relata Felipe que se ha desvinculado del club

Igual que Antonio Cassano, ha rescindido su contrato con el club (tenía firmado hasta 2016). Pierde dos años pero, asegura, pone fin a “meses de incertidumbre y tomadura de pelo”. Es el undécimo futbolista del Parma que dice adiós en el mes de enero. Cassano y él han rescindido el contrato; los demás (Acquah, Bidaoui, Cordaz, De Ceglie, Souza, Paletta, Pozzi, Rispoli y Ristovski) se han marchado cedidos. Algunos, como Pozzi, con una opción de recompra de 1.000 euros.

El técnico, Roberto Donadoni, se ha quedado. Dice que no quiere eludir responsabilidades. Ha habido días en los que sólo se ha entrenado con 15-16 jugadores, como si fueran los años ochenta. Está jugando la Liga con futbolistas que estaban cedidos, otros del filial y los que se han recuperado de las lesiones. El Parma, último en la tabla con 9 puntos (le quitaron uno en diciembre por impagos) debe 15 millones de euros en nóminas, además del IRPF y el IVA.

En mayo del año pasado no pudo inscribirse a la Europa League, por la que se había clasificado, por impagos del IRPF y una deuda de 300.000 euros. “Por entonces hubo alguna sospecha de que las cosas se complicarían, pero no que el club se arriesgaba a la quiebra. Nos decía el presidente Ghirardi que el Parma tenía un patrimonio importante, que no nos preocupáramos porque el problema era únicamente de liquidez y que pronto lo arreglaría”, relata Felipe.

El Parma, último en la tabla con 9 puntos (le quitaron uno en diciembre por impagos) debe 15 millones de euros en nóminas, además del IRPF y el IVA

El club, que sobrevivió a la bancarrota de Parmalat en 2003 y vivió una época de oro en los años noventa con Asprilla, Crespo, Buffon, Cannavaro, Thuram y compañía, necesita ahora unos 50 millones de euros para terminar el campeonato y arrastra una deuda de unos 70 millones. Ha cambiado cinco presidentes en siete meses. Tommaso Ghirardi dejó el club a finales de diciembre en manos de una compañía ruso-chipriota con sede en Chipre llamada Dastraso Holding. La compañía puso de presidente del club a tres hombres diferentes (Fabio Giordano, Emir Kodra y Rezart Taçi). Ninguno de ellos asumió la deuda ni pagó a futbolistas y empleados. “Cuando nos reunimos con Kodra a mediados de enero  y no nos dio garantías de pago ni siquiera para el mes de febrero, empezamos a preocuparnos y a movernos”, cuenta Felipe.

El martes hubo otro cambio de propiedad. Taçi vendió el club por un euro –“lo que nos gastamos en comprarlo”, aseguró su socio Kodra- a Giampietro Manenti dueño de una sociedad italo-eslovena con sede en Eslovenia. Tiene hasta el 16 de febrero para pagar los sueldos de plantilla y empleados: de no hacer frente a esos pagos, el club será sancionado con otra perdida de puntos. "Le pido a los hinchas que confíen en mí. Haré las cosas con criterio y contamos con respetar los plazos. Es más, hoy [por ayer] o como tarde mañana, saldrán las transferencias para pagar los sueldos", aseguró Manenti ayer en su presentación".

Todo tiene un límite. Hemos visto de todo esta temporada…  Estamos exhaustos", resume Roberto Donadoni 

“No huyo de mis responsabilidades, pero todo tiene un límite. Hemos visto de todo esta temporada… ahora hay una fecha límite que es la del 16 de febrero. Estamos exhaustos, o ese día o nunca más”, dijo Roberto Donadoni a principios de semana. ¿Cómo se ha llegado a esta situación? “Nos lo estamos preguntando nosotros también”, contesta por teléfono Damiano Tommasi, presidente de la Asociación de Futbolistas (ACI).

 “Los controles no son suficientes y ha quedado demostrado. Todo esto es peligroso porque puede falsear la regularidad del campeonato”, asegura Tommasi que en la reunión que ha mantenido con la plantilla del Parma ha pedido a los jugadores que tengan cuidado con el tema de los amaños y las apuestas ilegales ya que esa sería la única forma de ingresar dinero.

Haré las cosas con criterio y contamos con respetar los plazos. Hoy como tarde saldrán las transferencias para pagar los sueldos", dijo ayer el nuevo presidente

La Federcalcio (Federación de Fútbol) es la encargada de controlar cada tres meses que los jugadores cobren. En caso de retrasos o de impagos, quita puntos en la clasificación. Pero, nadie controla a los compradores. Los que han adquirido el Parma no han tenido que presentar ninguna declaración que certificara que podían hacerse cargo de las deudas y de los sueldos. De ahí que la Federación se plantee introducir el año que viene el Fit and proper person test que existe en la Premier desde 2004. Es una especie de test de honradez al que se someten todos los que quieren comprarse un club en Inglaterra y Escocia. Mientras, el Parma va camino de la quiebra y de terminar el campeonato con los jugadores del filial.