El inmovilismo de Ancelotti

“La alineación era la normal y la más lógica”, dijo ayer Carlo Ancelotti, con rostro oscurecido, en la sala de prensa del Vicente Calderón. El Atlético acababa de humillarle con un 4-0 a base de fútbol e intensidad y de poner fin –salvo cruce en Champions- a la tanda de derbis de la temporada. Han sido seis. El Madrid no ha ganado ni uno: cuatro derrotas y dos empates.

Hay una imagen que, más que cualquiera de las muchas que dejó el partido, resume lo que ocurrió anoche en el estadio rojiblanco. Saúl remata de chilena en el área del Madrid ante la mirada de siete jugadores blancos. El que estaba más cerca, Khedira, estaba a dos metros. Los demás, Nacho, Varane, Kroos, Coentrão y Carvajal, a más de tres. Isco, a años luz. Todos alrededor de Saúl que tuvo tiempo de decorar el centro de Siqueira con una esplendida chilena.

A los madridistas sólo les faltó sacar la cámara de fotos. Era el minuto 17, era el segundo gol del Atlético. No se oyó un grito por parte de los jugadores del Madrid. Nadie se enfadó, nadie soltó una grosería para despertar a la tropa y convencerla de que había tiempo de sobra para remontar el partido. Nadie arrimó el hombro. Todos se quedaron a verlas venir.

Al conjunto blanco le faltó juego y liderazgo ayer. A falta de dos de los tres capitanes (Sergio Ramos y Marcelo) y de la garra de Pepe, Ancelotti no ejerció de capitán general. El técnico italiano fue un resignado más. Lleva semanas asegurando que algo se inventaría para descolocar al Atlético de Simeone y, sin embargo, no ha tenido un plan. El rival le ha exigido un cambio de guión y él ha seguido con el mismo de siempre.

Simeone bloqueó una vez más a los pasadores blancos, los que abastecen de pases y balones a los tres de arriba

“Con los tres de arriba hemos ganado la Champions y el Mundial de Clubes así que me parece que la pregunta no tiene sentido”, contestó cuando le preguntaron si aún estaba convencido de querer alinear a Bale, Benzema y Cristiano siempre que estuvieran bien. Pero sí tiene sentido la pregunta porque la llamada BBC ha funcionado siempre pero no contra el Atlético. Simeone ha frenado la pegada del Madrid desde el medio campo.

En los derbis que lleva esta temporada se ha impuesto desde la medular que siempre ha sido superior a la del Madrid. El técnico argentino bloqueó una vez más a los pasadores blancos, los que abastecen de pases y balones a los tres de arriba. Convencido de que tarde o temprano los delanteros acabarían marcando, Ancelotti ha seguido con su plan. No ha innovado nada. No ha intentado buscar ninguna otra respuesta que no fuera encomendarse a su pegada. Anoche hasta esa palideció. Por primera vez en lo que va de Liga el Madrid se quedó sin marcar.

Convencido de que tarde o temprano los delanteros acabarían marcando, Ancelotti ha seguido con su plan. No ha innovado nada

Era complicado hacerlo viendo los números del encuentro: cero remates cero saques de esquina y cuatro llegadas al área en la primera parte; un remate fuera y uno a puerta en la segunda. Anulado quedó el Madrid. “No hemos tenido buena circulación del balón, ni presión, ni hemos ganado balones para poder armar la contra. No hemos tenido nada hoy”, explicó Ancelotti, que achacó la derrota a la falta de ganas y actitud de los jugadores (Marcelo, Keylor Navas y James, por si fuera poco, salieron cantando en un vídeo en el cumpleaños de Cristiano Ronaldo después de la debacle en el Calderón).

No hubo ganas ni actitud, pero tampoco hubo un golpe de efecto, algo que descolocara a Simeone que venía con su plan preparado. La táctica del Cholo consistía en concentrar a sus marcadores en los pasadores del Madrid, que además sólo eran dos: Isco y Kroos. La táctica de Ancelotti consistía en los de siempre: un 4-3-3 con la entrada de Khedira para, según dijo el técnico, frenar el juego a balón parado del rival.

No ha intentado buscar ninguna otra respuesta que no fuera encomendarse a su pegada. Anoche hasta esa palideció

El 4-3-3 que funciona contra todos los rivales, contra el Atlético hace agua por todas partes. Ni Bale ni Benzema ni Cristiano bajaron ayer a ayudar al equipo cuando el Atlético tenía la pelota, ni Kroos, ni Isco ni Khedira consiguieron hacer llegar balones al área. Se vio anoche, se vio en la eliminatoria de Copa a principios de enero, se vio en Liga en septiembre y en la Supercopa a finales de agosto. Pero Ancelotti no ha tomado medidas ni ha sabido sacarse un conejo de la chistera.

“Aprenderemos de los errores para que no nos vuelva a ocurrir esto”, aseguró anoche. El Atlético, mientras, se ha puesto a cuatro puntos y el Barcelona, de ganar en San Mamés, se pondrá a uno.